Navío Eugenio, San 1775
Posted By Todoavante on 17 de diciembre de 2011
Construido en Ferrol por el sistema francés de Francisco Gautier, mejorando los primeros construidos en el arsenal gallego por este sistema, resultando un excelente navío. Tenía 198 pies de eslora, 176 pies de quilla, 53 pies y 2/3 de manga, 25 pies y 5/6 de puntal. Desplazaba 1.765 toneladas de arqueo. Armado con 74 cañones, aparece en varios listados con 80 cañones. Botado el 29 de junio de 1775 y entregado a la Armada ese mismo año.
El 24 de octubre de 1775 zarpa de Ferrol rumbo a Cádiz al mando del brigadier don Juan de Lángara y Huarte, realizando durante la travesía sus primeras pruebas en el mar, llegando al puerto gaditano el 14 de noviembre, fecha en que Lángara mandó un informe sobre las buenas cualidades del navío.
El 14 de febrero de 1776 zarpa de Cádiz con los navíos Oriente y San Miguel, división al mando del brigadier Lángara. Entre el 15 de marzo y el 9 de abril de ese año, fecha en la que regresan a Cádiz, realizaron varios cruceros en los que se aprovechó para realizar varias pruebas comparativas de navegación. En abril de 1776 realizó con el navío Vencedor un crucero sobre las costas de Argel.
Al mando del capitán de navío don Antonio Domonte y Ortiz de Zúñiga, embarcan en los navíos San Eugenio y Vencedor, 60 guardiamarinas para ser llevador de Cádiz a Cartagena, donde se había creado una nueva Compañía de guardiamarinas. Los desembarcaron en Cartagena el 18 de julio.
Del 12 de agosto al 17 de septiembre de 1776 pertenece a la escuadra del jefe de escuadra don Miguel José Gastón de Iriarte en crucero por las islas Canarias, al mando del capitán de navío don Antonio Domonte, con los navíos Velasco, Oriente y San Francisco de Paula y las fragatas Santa Catalina y Santa Gertrudis, con la misión de reconocer las embarcaciones que se encuentren y detener a las que lleven pertrechos sin facturar.
A finales de 1776 zarpa de Cádiz y se dirige a Ferrol con el navío Oriente y otros buques. Al comenzar la guerra contra los británicos en junio de 1779, zarpa de Cádiz el día 23 de ese mes con la escuadra del teniente general don Luis de Córdoba para participar en la primera campaña del Canal de la Mancha. Regresa la escuadra el 19 de noviembre, permaneciendo en alta mar para cubrir la ausencia de la escuadra de don Juan de Lángara, hasta que entra en Cádiz a finales de diciembre, dejando en altar mar a los navíos San Eugenio, Princesa y Monarca, siendo estos tres navíos incorporados a la escuadra de Lángara a su regreso de Cartagena.
Con la escuadra de don Juan de Lángara participó el 16 de enero de 1780 en la batalla del cabo de Santa María contra la británica al mando del almirante Rodney. El navío San Eugenio, al mando del capitán Domonte, había sido hecho prisionero. Los fuertes vientos posteriores a la batalla hacían imposible su gobierno a la tripulación británica. Antes de perecer contra las rocas pidieron ayuda a los españoles prisioneros, por lo que el navío pudo llegar a Cádiz en manos españolas.
Reparado de los desperfectos de la batalla, zarpó de Cádiz rumbo a Ferrol para llevar al teniente general don Antonio de Arce, nombrado capitán general del departamento. A su regreso a Cádiz se integró en la escuadra de Córdoba para bloquear los accesos a Gibraltar.
En agosto de 1781, con la misma escuadra al mando de Córdoba, realizó una nueva campaña en el Canal de la Mancha. Al mando del capitán de navío don Ignacio Duque de Estrada zarpar el 7 de abril de 1782 con una división mandada por el brigadier don Francisco Hidalgo de Cisneros. La división estaba compuesta por cinco navíos y una fragata y tenía como comisión cruzar en cabo Espartel. Un fuerte temporal les empuja hacia el estrecho, llegando al puerto de Málaga la tarde del 22 de abril.
Los fuertes vientos contrarios obligan a los buques de Cisneros a permanecer anclados en la bahía de Málaga hasta la tarde del 7 de mayo que levan anclas y ponen rumbo a Cádiz, teniendo que fondear de nuevo en Málaga al día siguiente. La noche del 19 de mayo zarpan los buques del brigadier Cisneros. Se han unido en Málaga a su conserva el navío Santa Isabel que tiene como destino Cádiz, la balandra Paloma, un convoy francés procedente de Marsella y los buques de registro españoles.
El 28 de agosto de 1782 fondeó en la bahía de Algeciras con la división del brigadier Cisneros cuando se encontraba cruzando al Oeste del estrecho de Gibraltar. A las dos de la tarde del 9 de septiembre zarpa de la bahía de Algeciras con los navíos españoles San Lorenzo y Astuto y los franceses Dictateur y Sufisant para incorporarse a los buques del jefe de escuadra Moreno salidos esa misma mañana en el bombardeo de Gibraltar desde Punta Europa. A causa del viento flojo se incorporaron tarde al bombardeo.
Se encontraba en esta bahía con otros navíos españoles y franceses, cuando el 12 de septiembre de 1782 llegó la escuadra de Córdoba, incorporándose a ella. En septiembre de 1782 participa desde la bahía de Algeciras en el apoyo de las baterías flotantes en su ataque a Gibraltar. El 21 de octubre se encontraba en la escuadra de Córdoba durante la batalla de cabo Espartel contra la británica de Howe, aunque no llegó a participar en la refriega.
Al mando del brigadier don Felipe González Haedo zarpó de Cádiz en 1783 rumbo a Montevideo, pasando después a las costas del Pacífico, arribando a los puertos de Valparaíso, Talcahuano y El Callao. Su misión era proteger el comercio de los piratas y navíos extranjeros. Regresó a Cádiz en 1787, siendo desarmado y su comandante desembarcado.
A finales de noviembre de 1786 se encontraba desarmado en el departamento de Ferrol al mando del capitán de navío don Manuel Ruiz Mazmela. Al mando del capitán de navío don Domingo Pérez de Grandallana y su segundo el capitán de fragata don Ignacio María de Alcíbar hizo corso por el Océano el año 1790.
En noviembre de 1790 se le da su mando al capitán de navío don José Serrano Valdenebro y forma división con las fragatas Santa Rosa y Santa Rosalía, efectuando varios transportes de tropas. Estuvo en la evacuación de la plaza de Orán en 1791, previamente concertada con el ministro Floridablanca, a cambio de convenios comerciales, por la situación de la plaza tras el terremoto.
Con los buques del jefe de escuadra don Felipe López de Carrizosa realizó dos cruceros contra los corsarios marroquíes en 1791 en el Océano. En 1793 se encontraba desarmado en el departamento de Ferrol al mando del capitán de navío don Luis Santisteban.
El 11 de junio de 1793 zarpa de Cádiz con la escuadra del teniente general don Gabriel de Aristizabal al mando del brigadier don Antonio Ocarol, siendo el San Eugenio el buque insignia de Aristizabal. La escuadra estaba compuesta por seis navíos y una fragata cargados de tropas y pertrechos para actuar contra las posesiones francesas en el Caribe. Esta escuadra dio escolta desde Cádiz a un convoy compuesto por siete fragatas que llegaron a Veracruz los días 21, 22 y 23 de agosto de 1793.
Al puerto de La Guaira llegó la escuadra el 26 de julio. Zarpa la escuadra rumbo a Santo Domingo el 2 de agosto con 500 soldados que son transbordados el día 6 a varios buques mercantes, regresando la escuadra a Puerto Cabello el 11 de agosto, donde hicieron la invernada, preparándose para la próxima campaña contra los franceses en Santo Domingo.
El 10 de diciembre de 1793 zarpa la escuadra de Puerto Cabello dando escolta a varios mercantes salidos de la Guaira hasta Santo Domingo y Puerto Rico. Después de cruzar varios días en aquellas aguas, Aristizabal puso rumbo a bahía de Manzanillo, próxima a Monte-Cristi, donde llegaron el 3 de enero de 1794 con los navíos San Eugenio, San Lorenzo, San Isidro y San Juan, el bergantín Rosario y otros buques menores.
El 26 de enero llegaron otros buques, el navío San Ramón y la fragata Santa Águeda con tropas de refuerzo. Después de tres semanas de bloqueo del Fuerte Delfín, los franceses se rindieron el 29 de enero.
La escuadra del general Aristizabal abandonó las aguas de Santo Domingo el 9 de mayo de 1794 y entró en la Habana el 7 de junio para reparar, abastecerse e invernar. Se encontraba en la bahía habanera cuando la tarde y noche del 27 y mañana del 28 de agosto sufre la escuadra muchos daños a causa de un temporal. A finales de septiembre de 1794 pertenecía a la escuadra de Aristizabal que operaba con base en la Habana. Estaba al mando del capitán de navío don Juan Salcedo e izaba su insignia el general Aristizabal.
El 27 de febrero de 1795, al mando del capitán de navío don Juan Salcedo, zarpa de la Habana y 29 de marzo llega el San Eugenio a la isla de Trinidad al frente de otros dos navíos, cuatro fragatas y un bergantín, escuadra al mando de Aristizabal para apoyar al gobernador español en su lucha contra los insurgentes de la isla. En octubre de 1795 regresó la escuadra a la Habana.
Desde diciembre de 1795 participó en la evacuación de las tropas y civiles de la zona de Santo Domingo ocupara durante la guerra con Francia. En diciembre de ese año zarpó del puerto de Ocoa, Santo Domingo, con el navío San Lorenzo y la fragata Sirena con tropas y personal evacuado rumbo a la Habana. Llegó a la Habana en solitario el 27 de diciembre de 1795.
El 17 de junio de 1796, al mando del comandante Salcedo, volvió a zarpar de Puerto Delfín, Bayajá, con otros tres navíos, Asia, San Ramón y Santa Isabel, llegando a la Habana la noche del 23 de junio con más tropas y familias, excepto el navío Asia que es destacado a Santiago de Cuba para desembarcar a 169 hombres del 2º Batallón de la Habana.
Cuando estalló la siguiente guerra en octubre de 1796 contra Gran Bretaña, se encontraba en La Habana y seguía siendo el buque insignia del teniente general don Gabriel de Aristizabal. El 5 de julio de 1797 se presenta ante la Habana una escuadra británica de tres navíos (1 de 74, 2 de 50 cañones), una fragata de 40 cañones y una goleta. En junta de guerra se acordó armar los navíos San Eugenio, Santa Isabel y San Ramón. Aunque esta escuadra desapareció de la vista de la Habana el 6 de julio, volvió a aparecer el día 7 con 10 buques de guerra entre navíos y fragatas, desapareciendo definitivamente el 9 de julio.
El 20 de julio zarpó de la Habana la escuadra de Aristizabal compuesta de cuatro navíos, San Eugenio, Santa Isabel, San Ramón, Ángel de la Guarda, cuatro fragatas y un bergantín para proteger la recalada de buques mercantes y de guerra que debían llegar de Honduras (navío San Lorenzo y dos fragatas), Veracruz (navío Asia con caudales, fragata Minerva con un convoy) y el navío Ángel y dos fragatas, regresando la escuadra de Aristizabal a puerto a mediados de agosto de 1797. A estos buques se agregó la división del navío Ángel de la Guarda, que entró en la Habana el 16 de julio, antes de la salida de Aristizabal.
En 1799, todavía en guerra con Gran Bretaña, era insignia de la escuadra de Aristizabal con base en la Habana, formada por los navíos San Lorenzo, Ángel de la Guarda, Asia, San Ramón y San Leandro, las fragatas Santa Perpetua, Sirena, Minerva y Tetis y la corbeta Diligencia. Regresó a Cádiz al acabar la guerra en 1802 y se excluyó en La Carraca por falta de carena en 1804.
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Compilada por Santiago Gómez.
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