Construido en Société ProvÇenale La Ciotat. Francia 1927.
Desplazamiento: 1.190 t. Dimensiones: Eslora 69’90 por
10’53 de manga y calado de 5’79 metros. Máquina: alternativa de triple
expansión, con 425 C.V. Velocidad: máxima 13 nudos.
Bacaladero construido para PYSBE armado por el gobierno
vasco, montaba un cañón Vickers de 101’6/50 mm, dos ametralladoras Schwarzlose
de 8/50 mm y otra Astra-Unión de 7/57 mm, el 14 de noviembre se le entregó el
mando al capitán (mercante) D. Augusto Fernández González de Linares y segundo
D. Alejo Bilbao Beltrán de Guevara.
Durante el tiempo que transcurre entre el 18 de julio de
1936 y el 9 de diciembre seguido, todos los bacaladeros armados de PYSBE,
prestaron servicios de guardacostas, protegiendo con su presencia y fuego el
abastecimiento de las costas del Cantábrico, en el último día citado por
crearse la marina vasca, (separada en principio de la Marina gubernamental)
todos sus capitanes recibieron grado militar, pasando a ser denominados Comandantes
(el tradicional en España desde 1760) con el grado de Teniente de Navío, menos
el Bizkaya,
por ser nombrado su anterior Segundo su comandante.
El dato más importante en este tiempo sucedió cuando el Mistral y Euskal-Erria, salieron al mar el 14 de noviembre de 1936 a las 24:00, quedando en Bilbao el Vendaval por averías en su máquina, al amanecer se pudieron reunir los dos buques, sobre las 08:50 avistaron por sus popas un buque de guerra que les seguía, porque era sabido que estos buques sólo montaban artillería en proa, lo que daba lugar a si se colocaban por su popa, el blanco era más fácil, pero el Mistral sí llevaba el cañón Vickers de 76’2/50 mm capturado al bou nacional Tiburón en agosto anterior en el puerto de Santander, por ello inmediatamente abrió fuego sobre el destructor Velasco, pues no era otro (no había ninguno más), viendo el destructor que recibía respuesta, optó por aumentar la velocidad y posicionarse entre la costa y los guardacostas, llegando a estar en paralelo a los dos, lo que a su vez permitió a estos defenderse con su pieza principal.
Poco después el destructor hacia blanco en la caseta de popa del Mistral, poco más tarde otro blanco a pocos centímetros de la línea de flotación, un tercer impacto atravesó el guarda calores, así como otros varios de un cañón de 20 mm, en diferentes lugares de su estructura, (lo que nos dice no debían estar muy lejos), pero casi seguido el Velasco fue acertado con un proyectil, el cual le cortó las tuberías de evacuación, perdiendo vapor y por tanto velocidad, además de la importante amenaza de inundarse la sala de máquinas, que de producirse hubiera explosionado y hundido, por ello puso proa a Pasajes para reparar. Lo de siempre en estos combates ocurrió, pues tanto el Mistral se arrogaba el impacto con su cañón de 76’2 mm, mientras que él Euskal-Erria, aseguraba que era suyo de 101’6 mm, lo que no sabemos es la opinión del Velasco, pero si la encontramos, la haremos notar.
La llegada a Bilbao del mercante Aurora procedente de Cartagena, embarcando 2 cañones de 101’6 mm del primer acorazado España, decidió al gobierno vasco a armar a sus tres restantes patrulleros, con dos piezas de este calibre, porque el Araba por sus problemas de máquinas, fue desarmado, así el Bizkaya ex Euskal-Erria estuvo terminado a finales de enero de 1937, continuando en sus patrullas dando protección a los mercantes con destino a Bilbao.
El 4 de marzo de 1937, salían de Bilbao los patrulleros Gipuzkoaex Mistral, Bizkaya, Nabarraex Vendabal y Donostia, con rumbo a Bayona, para dar escolta al mercante Galdames y que pudiera entra en Bilbao, quedando configurado a las 21:30 con los Nabarra y Donostia a estribor del mercante, y los Bizkaya y Gipuzkoa a babor, la mar en estado de gruesa dificultaba el avance, de hecho el mercante sólo podía dar unos cinco nudos, esto retrasaba mucho al convoy, como causa de ello, los que navegan a estribor quedaron separados, rompiendo así la unidad, la mar siguió empeorando de forma que a las 01:00 del 5 de marzo, la visibilidad era casi nula, a su vez el Bizkaya también perdió contacto, a pesar del riesgo, el patrullero encendió las luces para poder ser visto por sus compañeros, logrando a las 09:00 volviera a reunirse con el Gipuzkoa, al norte del cabo de Machichaco, decidiendo ambos comandantes navegar a rumbos distintos, para intentar reunirse con el resto, el primero hacia Levante y el segundo a poniente, tras unas horas de intentarlo decidieron poner rumbo a Bilbao.
Por parte nacional, todos los buques estaban en la mar, en un dispositivo determinado por estar a la espera de la llegada del Mar Cantábrico, procedente de Méjico con carga de aviones y municiones con rumbo a Bilbao, a su vez el crucero Canarias, quien casualmente se encontraba en Ferrol reparando su hélice de estribor, por un abordaje en el Estrecho, con el mercante griego Mariopi, el cual se dejó su ancla de babor, clavada en la aleta de estribor del crucero, causándole un desgarro de unos 20 metros, todo a causa de una niebla que impedía ver más allá de 50 metros.
Reparada salió de Ferrol con rumbo al Estrecho, cuando recibió la orden de regresar para formar parte del dispositivo, aunque en su caso con libertad de acción de su comandante, cuando a las 10:20, se encontraba al Nordeste de Cabo Machichaco, avistó un mercante, arrumbando a él, al poder distinguirlo supo era el Yorkbrook, ya famoso buque con bandera de Estonia, por las muchas veces que había sido identificado, para no perder tiempo, se envió una comunicación al destructor Velasco, para que acudiera y darle escolta a Pasajes, el problema era que, no se podían repetir los mensajes, para evitar ser detectados (por utilizar ambos bandos la misma onda), y en este caso fue perjudicial, porque el Velasco no recibió el mensaje, pero el crucero continuó a su rumbo anterior a Bilbao, dándose el caso paradójico que al proseguir en él, se había incrustado entre los dos grupos de escoltas del Galdames.
El Bizkaya, dio por finalizado su
intento de localizar al convoy, por ello a las 13:10 avistó al Canarias
cuando éste iba a la caza del Gipuzkoa, dando la alerta a su base,
todo esto más los ya conocidos avisos de su compañero, mantenían en alerta a
toda la costa y con la orden de abrir fuego en caso de que el crucero
nacionalista se pusiera a tiro, en su intento de acercarse a la costa, el
patrullero avistó al mercante Yorkbrook,
obligándole a seguirle, a pesar que desde éste se le notificaba que ya era
presa, pero el patrullero le obligo so pena de hundirlo, al final entraban
ambos en Bermeo sobre las 15:55 horas, comenzando inmediatamente la descarga de
su preciada mercancía. Con estos datos concluye su actuación en el llamado
encuentro naval del Cabo Machichaco.
El Bizkaya, continuo prestando sus servicios, dando escolta a los pocos mercantes que entraban en Bilbao, el 1 de junio su comandante, fue nombrado comisario político del destructor Císcar, al ser requisados por el gobierno vasco, nombrando a su segundo como nuevo comandante del patrullero D. Ramón Garrastazu Basterretxea, quien abandono su mando, embarcando en el yate Epailla 5, huyendo con destino a Francia, siéndole entregado el mando del patrullero a D. José Antonio Sopelana Beaskoetxea, saliendo de Bilbao el 15 de junio, con rumbo a Santoña donde entraba el mismo día por la noche, el 21 seguido se toma la decisión de desarmar los patrulleros, para con su artillería defender la costa, el 5 de julio cesaba su comandante, siendo sustituido por D. Alejo Bilbao.
El avance de los nacionales por el norte, supuso un nuevo cambio de comandante, pasando a serlo el teniente de navío de la reserva naval don Francisco Murga, por pasar a depender de las Fuerzas Navales del Cantábrico el 5 de agosto, comenzando a desembarcar las dotaciones de los patrulleros, así como el bou Iparrekop-Izarra, saliendo con rumbo Santander, donde fueron vueltos a armar y embarcando nueva dotación con miembros de la Fuerzas Navales del Cantábrico, de quien ahora dependían, a partir de ahora ya no salieron a la mar, sólo el trayecto hasta Gijón, embarcando todo lo que pudieron, entre ellos varios refugiados políticos, el 24 era tomada Santander, decidiendo desarmar el patrullero, para emplear su artillería en defensa de costa del puerto asturiano, salieron el 25 con intención de entrar en Santander, pero se les advirtió que el puerto estaba tomado, por ello sólo les quedo navegar hasta la costa francesa, donde entraron en La Verdon el 28 seguido, quedando allí hasta finalizar la guerra, cuando reclamados por sus dueños les fueron devueltos, en este caso por haber dejado su artillería en Gijón, fue pronto gestionada su entrega a sus armadores.
Construido por Cox & Co. Engineers Ltd. en Falmouth
(Reino Unido) 1929.
Desplazamiento: 1.252 t. Dimensiones: Eslora 64 por 10’50
de manga y calado de 5’85 metros. Máquina: alternativa de triple expansión, con
425 CV. Velocidad: máxima 11 nudos.
Bacaladero construido para PYSBE, muy marinero como todos ellos, se encontraba en Bilbao al producirse el alzamiento, por ello se incorporó a la marina vasca, (separada de la gubernamental) fue armado en los astilleros de Euskalduna, con un cañón Vickers de 101’6/50 mm, en proa, un cañón Vickers de 76’2/50 mm en popa, procedente del bou ex-nacional Tiburóncapturado en agosto en Santander, una ametralladora Hotchkiss de 9 mm y dos Steyr de 8 mm entregando el mando el 3 de noviembre al capitán (mercante) D. Manuel Galdós Uzkanga y primer oficial D. Jesús de la Quintana Salaberri.
Durante el tiempo que transcurre entre el 18 de julio de
1936 y el 9 de diciembre seguido, todos los bacaladeros armados de PYSBE,
prestaron servicios de guardacostas, protegiendo con su presencia y fuego el
abastecimiento de las costas del norte de España, en el último día citado por
crearse la marina vasca, todos sus capitanes recibieron grado militar, pasando
a ser denominados Comandantes (el tradicional en España desde 1760) con el
grado de Teniente de Navío, menos el Bizkaya, (que se menciona en su
historial).
El dato más importante en este tiempo sucedió cuando el Mistral y Euskal-Erria, salieron al mar el 14 a las 24:00, quedando en Bilbao el Vendaval por averías en su máquina, al amanecer se pudieron reunir los dos buques, sobre las 08:50 avistaron por sus popas un buque de guerra que les seguía, porque era sabido que estos buques sólo montaban artillería en proa, lo que daba lugar a si se colocaban por su popa, el blanco era más fácil, pero el Mistral sí llevaba el cañón Vickers de 76’2 mm capturado al bou nacional Tiburón en agosto anterior en el puerto de Santander, por ello inmediatamente abrió fuego sobre el destructor Velasco, pues no era otro (no había ninguno más), viendo el destructor que recibía respuesta, optó por aumentar su velocidad y posicionarse entre la costa y los guardacostas, llegando a estar en paralelo los dos.
Esto a su vez les permitió defenderse con su pieza
principal, poco después el destructor hacia blanco en el Mistral en la caseta de
popa, poco más tarde otro blanco a pocos centímetros de la línea de flotación,
un tercer impacto atravesó el guarda calores, así como otros varios de un cañón
de 20 mm, en diferentes lugares de su estructura, lo que nos dice no debían
estar muy lejos, pero casi seguido el Velasco fue acertado con un
proyectil, el cual le cortó las tuberías de evacuación, por ello perdió vapor y
por tanto velocidad, además de la importante amenaza de inundarse la sala de
máquinas, lo que de ocurrir hubiera explosionado y hundido al buque, por ello
puso proa a Pasajes para reparar y asegurar no se perdía.
Lo de siempre en estos combates ocurrió, pues tanto el Mistral se arrogaba el impacto con su cañón de 76’2 mm, mientras que él Euskal-Erria, aseguraba que era suyo de 101’6 mm, lo que no sabemos es la opinión del Velasco, pero si la encontramos, la haremos notar.
La llegada a Bilbao del mercante Aurora procedente de Cartagena, embarcando 2 cañones de 101’6/50 mm del primer acorazado España, decidió al gobierno vasco a armar sus tres restantes patrulleros, con dos piezas de este calibre, porque el Araba por sus problemas de máquinas, fue desarmado, así el Gipuzkoa estuvo terminado a finales de enero de 1937, continuando en sus patrullas dando protección a los mercantes con destino a Bilbao, manteniendo las tres ametralladoras ya citadas.
El 4 de marzo de 1937, salían de Bilbao los patrulleros Gipuzkoa ex Mistral, Bizkaya ex Euskal-Erria, Nabarraex Vendabal y Donostia, con rumbo a Bayona, para dar escolta al mercante Galdames para entra en Bilbao, quedando configurado a las 21:30 con los Nabarra y Donostia a estribor del mercante, y los Bizkaya y Gipuzkoa a babor, la mar en estado de gruesa dificultaba el avance, de hecho el mercante sólo podía dar unos cinco nudos, esto retrasaba mucho al convoy, como causa de ello, los que navegan a estribor quedaron separados, rompiendo así la formación, la mar siguió empeorando de forma que a las 01:00 del 5 de marzo, la visibilidad era casi nula, a su vez el Bizkaya también perdió contacto, a pesar del riesgo, el patrullero encendió las luces para poder ser visto por su compañero, logrando a las 09:00 se volviera a reunir con el Gipuzkoa, al norte del cabo de Machichaco, decidiendo ambos comandantes navegar a rumbos distintos para intentar reunirse con el resto, el primero hacia Levante y el segundo al Oeste, tras unas horas de intentarlo decidieron poner rumbo a Bilbao.
Por parte nacional, todos los buques estaban en la mar, en un dispositivo determinado por estar a la espera de la llegada del Mar Cantábrico, procedente de Méjico con carga de aviones y municiones con rumbo a Bilbao, a su vez el crucero Canarias, quien casualmente se encontraba en Ferrol reparando su hélice de estribor, por un abordaje en el Estrecho, con el mercante griego Mariopi, el cual se dejó su ancla de babor, clavada en la aleta de estribor del crucero, causándole un desgarro de unos 20 metros, todo a causa de una niebla que impedía ver más allá de 50 metros.
Reparada salió de Ferrol con rumbo al Estrecho, cuando recibió la orden de regresar para formar parte del dispositivo, aunque en su caso con libertad de acción de su comandante, cuando a las 10:20, se encontraba al Nordeste de Cabo Machichaco, avistó un mercante, arrumbando a él, al poder distinguirlo supo era el Yorkbrook, ya famoso buque con bandera de Estonia, por las muchas veces que había sido identificado, para no perder tiempo, se envió una comunicación al destructor Velasco, para que acudiera y darle escolta a Pasajes, el problema era que, no se podían repetir los mensajes, para evitar ser detectados, y en este caso fue perjudicial, porque el Velasco no recibió el mensaje, pero el crucero continuó a su rumbo anterior a Bilbao, dándose el caso paradójico que al proseguir con este rumbo, se había incrustado entre los dos grupos de escoltas del Galdames.
A las 12:55 avistó al Gipuzkoa, a 10 millas al
norte de Castro Urdiales, aumentando su velocidad para cortarle el rumbo, al
estar a seis mil metros a las 13:35 abrió fuego con sus cañones de 120 mm,
estos no llevaban direcciones de tiro y el mal estado de la mar, hacía casi
imposible que el fuego fuera preciso, pero a su vez fue respondido dada la poca
distancia entre buques por el patrullero, a los pocos minutos éste recibió un
impacto en su cañón de proa, quedando fuera de servicio, muriendo un cabo
artillero y un artillero más otros de la dotación de la pieza fueron heridos,
el patrullero no dejó de defenderse, ahora con su sola pieza de popa, efectuó
un disparo que acertó un poco por debajo de la dirección de tiro B, hiriendo
mortalmente al guardiamarina D. José María Cheriguini, quien falleció unas
horas más tarde.
Viendo el comandante del crucero lo poco efectivo de su
fuego, ordeno disparar con su artillería principal a las 13:45, recibiendo el
patrullero una salva que prácticamente deshizo el buque, provocando un grave
incendio, siendo entre otros muchos heridos su comandante, aun así logró
ponerse a salvo al estar bajo el fuego de la batería de Punta Galea y habiendo
atravesado el campo de minas, recibiendo el crucero el fuego tanto de esta
batería como la de Punta Lucero, pero observados los daños en el patrullero, el
comandante del crucero lo dio por perdido, por ello ordenó a las 14:00 regresar
a su zona de patrulla.
Lo que ya no supo el crucero fue, que el patrullero logró entrar en Portugalete, ayudándole el remolcador Altus, quien sobre él lanzaba agua con sus mangueras. Esta fue toda su intervención en la llamada acción naval del Cabo Machichaco.
El Gipuzkoa, sufrió las bajas mortales
de su Segundo oficial D. Victoriano Sáinz Pérez, telegrafista, Benito Rodríguez
Luque, el cabo de cañón, Faustino de Bastida, el artillero, Francisco Elordui y
el marinero, Gerardo Toubeau, y por los daños sufridos tuvo que ser reparado,
alargándose un mes y medio la puesta a punto, se aprovechó para hacer un buen
recorrido, lo más notable fue, variar la forma del puente, ahora ovalada para
evitar los impactos directos y sobre todo se le instalaron mamparos
transversales en su casco, pero estancos para mejorar su seguridad interna,
quedando listo para hacerse a la mar el 20 de abril.
El Gipuzkoa, continuo prestando sus servicios, dando escolta a los pocos mercantes que entraban en Bilbao, el 1 de junio su comandante, fue nombrado comisario político del destructor José Luis Díez, al ser requisados por el gobierno vasco, fue sustituido por D. Policarpo Bilbao Zubiaga, quedando incorporados a las Fuerzas Navales del Cantábrico saliendo de Bilbao el 15 de junio, con rumbo a Santoña, pero hizo una entrada en Laredo por ello entraba el 16 en su destino, Santoña, el 21 seguido se toma la decisión de desarmar los patrulleros, para con su artillería defender la costa, el 5 de agosto pasaron a formar parte de las Fuerzas Navales del Cantábrico, comenzando a desembarcar las dotaciones de los patrulleros, así como el bou Iparrekop-Izarra, saliendo con rumbo Santander, donde fueron vueltos a armar.
El 19 de agosto embarcaba nueva dotación con miembros de la Fuerzas Navales del Cantábrico, de quien ahora dependían, por ello hubo cambio de comandante, tomándolo ahora el teniente de navío de la Reserva Naval D. Andrés Corsino de Tuya, pero desde este momento no salieron a la mar, sólo el trayecto hasta Gijón, embarcando todo lo que pudieron, entre ellos varios refugiados políticos, el 24 era tomada Santander, decidiendo desarmar al patrullero, para emplear su artillería en defensa de la costa del puerto asturiano, (fueron asentados en la ría de Avilés) salieron el 25 con intención de entrar en Santander, pero se les advirtió que el puerto estaba tomado, por ello sólo les quedo navegar hasta la costa francesa, donde entraron en La Verdon el 28 seguido, quedando internado hasta finalizar la guerra, cuando reclamado por su dueño le fue devuelto.
Construido por Hall Russell. Aberdeen. Escocia. Reino
Unido, 1927.
Desplazamiento: 1.204 tn. Dimensiones: Eslora 65’40, por
10’40 de manga, por 5’85 metros de calado. Maquina: Alternativa de triple
expansión, con 425 CV. Velocidad máxima 10’5 nudos.
Bacaladero construido para PYSBE, muy marinero, se
encontraba en Bilbao al producirse el alzamiento, por ello quedó incorporado a
la marina vasca, fue armado en los astilleros de Euskalduna, con un cañón
Vickers de 101’6/50 mm y una ametralladora Hotchkiss fabricada en
Checoslovaquia, Schwarzlose de 7’92 mm, entregándole el mando al capitán
(mercante) D. Enrique Moreno Plaza y como segundo D. Rafael Menchaca Ugalde,
utilizado sobre todo para mantener la comunicación con Francia, su primera
salida se efectuó el 3 de noviembre de 1936, con destino al puerto de Gijón,
porqué en Bilbao no había reservas de carbón, donde cargó sus carboneras
regresando a su puerto base el 9 seguido.
Durante el tiempo que transcurre entre el 18 de julio de
1936 y el 9 de diciembre seguido, todos los bacaladeros armados de PYSBE,
prestaron servicios de guardacostas, protegiendo con su presencia y fuego el
abastecimiento de la costa norte, en el último día citado por crearse la marina
vasca (independiente de la gubernamental), todos sus capitanes recibieron grado
militar, pasando a ser denominados Comandantes (el tradicional en España desde
1760) con el grado de Teniente de Navío, menos el Bizkaya, (que se menciona
en su historial).
La llegada a Bilbao del mercante Aurora procedente de Cartagena, embarcando 2 cañones de 101’6 mm del primer acorazado España, (el que se hundió por embarrancar en el cabo de Tres Forcas en 1923) decidió al gobierno vasco a armar sus tres restantes patrulleros, con dos piezas de este calibre, porque el Araba por sus problemas de máquinas, fue desarmado, así el Nabarra ex Vendaval ex Nabara estuvo terminado a principios de febrero de 1937, continuando con sus patrullas dando protección a los mercantes con destino a Bilbao.
El 4 de marzo de 1937, salían de Bilbao los patrulleros Gipuzkoa ex Mistral, Bizkaya ex Euskal-Erria, Nabarra ex Vendaval y Donostia, con rumbo a Bayona, para dar escolta al mercante Galdames con destino a Bilbao, quedando configurado a las 21:30 con los Nabarra y Donostia a estribor del mercante, y los Bizkaya y Gipuzkoa a babor, la mar en estado de gruesa dificultaba el avance, de hecho el mercante sólo podía dar unos cinco nudos, esto retrasaba mucho al convoy, causando con ello que, los que navegan a estribor quedaran separados, rompiendo así el convoy, la mar siguió empeorando de forma que a las 01:00 del 5 de marzo, la visibilidad era casi nula, a su vez el Bizkaya también perdió contacto, a pesar del riesgo, el patrullero encendió las luces para poder ser visto por sus compañeros, logrando a las 09:00 volver a reunirse con el Gipuzkoa, al norte del cabo de Machichaco, decidiendo ambos comandantes navegar a rumbos distintos para intentar reunirse con el resto, el primero hacia Levante y el segundo al Oeste, tras unas horas de intentarlo decidieron poner rumbo a Bilbao.
Por parte nacional, todos los buques estaban en la mar, en un dispositivo determinado por estar a la espera de la llegada del Mar Cantábrico, procedente de Méjico con carga de aviones y municiones con destino a Bilbao, a su vez el crucero Canarias, quien casualmente se encontraba en Ferrol reparando su hélice de estribor, por un abordaje en el Estrecho, con el mercante griego Mariopi, el cual se dejó su ancla de babor, clavada en la aleta de estribor del crucero, causándole un desgarro de unos 20 metros, todo causado por una tupida y persistente niebla que, impedía ver más allá de 50 metros.
Reparado salió de Ferrol con rumbo al Estrecho, cuando recibió la orden de regresar para formar parte del dispositivo, para intentar el apresamiento del Mar Cantábrico, aunque en su caso con libertad de acción de su comandante, cuando a las 10:20, se encontraba al Nordeste de Cabo Machichaco, avistó un mercante, arrumbando a él, al poder distinguirlo supo era el Yorkbrook, ya famoso buque con bandera de Estonia, por las muchas veces que había sido identificado, para no perder tiempo, se envió una comunicación al destructor Velasco, para que acudiera a darle escolta a Pasajes, el problema era que, no se podían repetir los mensajes, para evitar ser detectados, (por utilizar la misma onda) y en este caso fue perjudicial, porque el Velasco no recibió el mensaje, pero el crucero continuó con rumbo a Bilbao, dándose el caso paradójico que al proseguir en él, se había incrustado entre los dos grupos de escoltas del Galdames.
Mientras el Canarias seguía a rumbo, hasta que a
las 14:40 avistó al convoy, (los tres buques iniciales), ahora se había
incorporado dos pesqueros, pues iban con rumbo a Bilbao después de faenar en
Gran Sol, el crucero aumentó la velocidad y al estar bajo su alcance, abrió
fuego con dos disparos sobre el mercante, con la artillería de 120 mm logrando
dos impactos, (de los muchos disparados; recordar que esta artillería no
llevaba dirección de tiro, sólo una local improvisada), como causa de ello
murieron nueve personas, de ellas una mujer y tres niños, por ello el mercante comunicó
se entregaba, al verlo el crucero varió el blanco y a las 15:07 disparó sobre
el Donostia,
de ellos uno hizo blanco y el bou no respondía, pensó el comandante del crucero
que estaba dañado, tomando ahora al Nabarra como blanco, abriendo fuego
a las 15:10 a una distancia de 7.000 metros, esta vez el fuego mejoró con las
piezas de 120 mm, (por acortar mucho la distancia) siendo alcanzado en la proa,
destrozando el molinete y los estopores, siendo desprendidas sus anclas cayendo
al mar, también provocaron un gran incendio, el patrullero intento defenderse
con sus dos piezas de artillería, de hecho logro un impacto en el crucero en la
amura de babor, al poco tiempo en el patrullero el cañón de proa dejo de
funcionar.
A pesar de estos aciertos casi casuales, siendo observado
por el comandante del crucero, decidió utilizar la artillería principal, los
primeros proyectiles impactaron sobre el puente, matando al timonel don José
Aramayo Marcuerquiaga y herido el segundo don José Olaveaga Echave, derribando
el guarda humos y el palo mayor, así como un incendio, por ello el crucero hizo
ahora de nuevo sobre el Donostia, quien recibió una nueva
salva de proyectiles de la artillería de 120 mm, provocando de nuevo otro
incendio, variando otra vez de objetivo contra el Nabarra, sobre el que
disparo, causando otro incendio, aunque este se produjo porque al abrir fuego
sobre el crucero, con su pieza de popa no salió el proyectil, y sin pensar más
el cabo de cañón Santiago Andrés Amautegui abrió el cierre, en cuyo momento se
produjo el disparo, comenzando a arder e hiriéndole en la cara por el grave
descuido.
En ese momento, el Nabarra izó una bandera, siendo repetido por el Donostia, lo que hizo creer al comandante del crucero D. Salvador Moreno Fernández que ambos se rendían, por ello dio orden de acercarse y no abrir fuego, pero uno no se puede fiar cuando está en guerra de señales no conocidas, sucediendo que al estar más cerca y haber solucionado el problema de su pieza el Nabarra, abrió fuego de pronto sobre el crucero, a pesar de la pequeña distancia, el Canarias ahora utilizó la artillería principal o torres Blancas, (las de proa), haciendo blanco con uno de sus proyectiles, quedando el patrullero prácticamente fuera de combate, pues había penetrado hasta su sala de máquinas, lo que ocasiono perder totalmente su fuerza de empuje, quedando a la deriva, así las cosas su comandante D. Enrique Moreno Plaza, ordenó el abandono del buque, pero ante esto ocurrió algo más que no se cuenta, está redactado en el diario de a bordo del crucero por su comandante: «Inmediatamente suspendí el fuego y maniobre para recoger a los náufragos, varios de los que se tiraron al agua fueron muertos a tiros disparados desde su propio barco, otros debieron ahogarse rápidamente pues solo pude encontrar y tomar a mi bordo a los que se salvaron en los botes…» en estos sólo estaban los 18, pero de los que quedaron a bordo, prácticamente sólo estaba el comandante y al parecer el primer oficial.
El crucero regresó al Galdames, obligándole a poner rumbo a Pasajes, ahora sí con escolta del destructor Velasco, a quien a su vez el crucero había trasbordado los 18 capturados de la dotación del Nabarra, que termino por irse a pique. Los dieciocho apresados, fueron juzgados en consejo de guerra en julio seguido, en la sentencia fueron declarados culpables y por ello condenados a muerte. Pero a veces el destino está en otras manos, dado que D. Salvador Moreno Fernández, entregó el mando del crucero poco después, por ser nombrado 2º Jefe del Estado Mayor de la Marina, por ello cerca de «Terminus», siendo quien intercedió para que fueran respetadas sus vidas, alegando que: «todos eran marineros, pero sin vínculos políticos, y sólo habían realizado su trabajo bajo órdenes superiores», consiguiendo con ello que Franco, quien desde un principio quería restañar las heridas de la guerra, por Real Decreto de noviembre de 1938, no sólo les perdonaba la vida, sino que les devolvió la libertad sin cargos.
Construido por Sud-Ouest en Burdeos. Francia, 1919.
Desplazamiento: 405 t. Dimensiones: Eslora 41 por 7’30 de
manga y 3’60 metros de calado. Máquina: Alternativa a carbón de 425 C.V.
Velocidad: máxima 10’5 nudos. Armamento: un cañón de Vickers 76’2/50 mm.
Patrullero francés Grognard, comprado por el gobierno, al
producirse el desastre de Annual y dado de alta en la LOBA en mayo de 1922. Al
ser incorporado a la Armada se le renombró, por el de este historial, en 1923
se le instaló un nuevo equipo de T.S.H.
Al producirse el alzamiento, se encontraba en su base Cartagena, quedando en la escuadra gubernamental, de donde se hizo a la mar el 15 de agosto, habiendo embarcado tropas formando parte de la flota a las órdenes del capitán Bayo, para ser desembarcadas en Porto Pi, para intentar apoderarse de Mallorca, fracasando en el intento, ante la rotunda respuesta de las tropas allí estacionadas, y el gran apoyo de la aviación, porque Italia entrego con muchas prisas varios de sus cazas CR-32, “Chirri” a los sublevados, regresando el buque a Cartagena; al parecer permaneció en ella con pocas salidas al mar.
En marzo de 1939 volvió a hacerse a la mar, pero su dotación se amotino, abandonando el buque en aguas cercanas a Ibiza, fue encontrado a la deriva por los nacionales el 13 de marzo, quienes le dieron remolque, pero tuvieron que abordarlo porque hacía mucha agua, y para evitar se hundiera fueron achicándola, fue reparado de urgencia y al estar medio listo, salió con rumbo a Cádiz. Continúo en su nueva base hasta finalizar la guerra, en el transcurso de ella no hay ninguna noticia importante reseñable, al finalizar el conflicto, por la necesidad de este tipo de buques, fue incorporado en la Marina, hasta ser dado de baja en la LOBA, el 9 de octubre de 1952.
Construido por Smit’s Dock Co. Reino Unido, 21 de mayo de
1917.
Desplazamiento: 430 tn. Dimensiones: Eslora 38’12 por 7’11 de manga y calado de 4’80 metros. Máquina: Alternativa de 500 C.V. Velocidad: máxima 9’50 nudos. Armamento: un cañón Armstrong de 76’2/50 mm.
Comprado en 1922 por el gobierno español, al producirse el desastre de Annual, por ser muy necesario controlar la mar.
Era el patrulleroHMS Ness, y anteriormente el HMS Alexander Palmer, al ser comprado el 15 de junio de 1922, fue renombrado con el que consta en este historial. En principio quedo por los nacionales, pero el mismo 18 de julio, estaba fondeado en Río Martín, donde se sublevó la dotación pasando a ser gubernamental, no se utilizaban mucho estos buques, así a mediados de octubre del mismo 1936, fue avistado frente a Málaga, junto a su hermano el Uad Muluya, por la primera entrada en el Mediterráneo del crucero Almirante Cervera, quien al recibir fuego de ellos, hizo lo propio y los hundió, con ellos también la lancha de Tabacalera nº 5.
Desplazamiento: 429 t. Dimensiones: Eslora 38’12 por 7’11
de manga y calado de 4’73 metros. Máquina: Alternativa de 500 C.V. Velocidad:
máxima 9’50 nudos. Armamento: un cañón Armstrong de 76’2/50 mm. Comprado en
1922 por el gobierno español, al producirse el desastre de Annual.
Era el patrullero HMS James Conner,anteriormente elHMS Waveney, al ser comprado el 16 de junio de 1922, fue renombrado por el que consta en este historial.
Se encontraba el Ceuta al producirse el alzamiento, quedando por los alzados, el 19 de julio seguido salió de Ceuta con rumbo a Tánger, el 20 se sublevó la dotación uniéndose a los gubernamentales, poco más hizo que navegar hasta Málaga, donde a mediados de octubre seguido, fue avistado por el crucero nacional Almirante Cervera en su primera entrada en el Mediterráneo, en sus cercanías se encontraba su hermano Uad Lucus, quienes al ver al crucero abrieron fuego, éste respondió y hundió a ambos, así como la lancha de Tabacalera nº 5.
Era una barca de pesca de 40 t. con el nombre de Carmelina.
Poco más se sabe sobre este buque. Suponemos quedo afecto a Palma, como buque sutil en apoyo de los buques allí destinados, pues al parecer ni siquiera fue armado.
Construido por Geo Brown en Greenock, Escocia. Reino
Unido, 1917.
Desplazamiento: 292 t. Dimensiones: Eslora 38’06, por
7’10 de manga y 3’72 metros de calado. Máquina de vapor con 500 C.V. y caldera
de 12 kg. Velocidad: 10 nudos. Armado con un cañón Armstrong/Elswick de 76’2/50
mm.
Era un patrullero con el nombre de HMS James Chapman, al
finalizar la Gran Guerra fue comprado en 1920 por un armador británico, quien
lo renombró Dunsby como pesquero,
pasando a ser comprado por un armador español en 1923 quien lo bautizo Atlántico nº 1.
Se encontraba en Cádiz al comenzar la guerra, por ello
fue incautado y armado por los nacionales, entregando el mando al teniente de
navío D. Diego Gómez Ruiz, pasando a
ser uno más de la flotilla de Cádiz, al crearse la del Estrecho para reunir las
tres existente, quedó en ella.
Aunque se encontraba la Flota gubernamental en el Cantábrico, al tenerse conocimiento de la llegada del vapor con bandera griega Sylvia, de 5.300 t. proveniente de América, tenía intención de entregarse a los nacionales, lo que no era cierto, pues fue bien sabido que estos traficantes griegos, lo que intentaban era ganar dinero; para no ser apresados, decían que querían unirse a unos, pero su intención era dar unas coordenadas, para luego variar rumbo y navegar por otras, en esta ocasión su carga era de 40.000 fusiles, 1.300 ametralladoras, 1.900 t. de cartuchería de fusil, más proyectiles de artillería y pólvora; el comandante General del Departamento, ordeno formar barrera sobre cabo Villano, al mercante armado Dómine y el acorazado España 2º, saliendo estos el 14 de octubre de 1936, permanecieron cruzando hasta el 16 seguido, a pesar de bajar hasta el meridiano de Oporto, pero no se le encontró, al encontrarse aquí recibieron la orden de regresar a puerto.
Este vapor griego continúo realizando varios viajes, pero en dos ocasiones fue capturado por el Atlántico, en los meses de marzo y mayo de 1937, al intentar cruzar el Estrecho, en las dos transportaba carbón que, si bien era un carburante, no era una carga de guerra, por esta razón en las dos mencionadas ocasiones, después de desembarcar su carga en Cádiz, se le daba libertad, por lo que llego a ser muy conocido por todos.
Continuo en servicio hasta octubre de 1937, es muy posible que estos pequeños buques, al finalizar la campaña del Cantábrico, y bajar algunos al Mediterráneo, dejara de ser útil, por ello se le desarmó y devolvió a su propietario, como lo fueron todos, unos antes y otros más tarde, por ser muy necesarios para llevar comida a tierra.
Desplazamiento: 115 tn. Dimensiones: Eslora 23’5 por 5’6 de manga y 3’85 de calado. Máquina: Motor diésel de 233 C.V. Velocidad: máxima 9’5 nudos. Armamento: un cañón Nordenfelt de 57/37 mm y una ametralladora Maxim de 37 mm. Hermano del Chamorro.
Fue construido por encargo de la empresa C. Constante Freire Vega de Vigo. Al producirse el alzamiento se encontraba en Vigo, fue incautado por los nacionales, pasó a Ferrol donde fue armado, entregando el mando al teniente de navío D. Fernando Solís y Núñez del Prado, (1) entre otras comisiones, entre el 25 de septiembre y 13 de octubre de 1936, al subir la escuadra gubernamental, todos los bous pasaron a Ferrol, por su seguridad, participando en una barrera junto a todos sus compañeros, por haberse avistado a cuatro sumergibles, pero como estos se sumergieron fue imposible detectarlos, al saber que la escuadra abandonaba estas aguas, el 19 de octubre los bous regresaron a su base de Ribadeo, pero a éste continuó en su destino de Vigo, permaneció en sus trabajos en las rías bajas gallegas, hasta que en septiembre de 1938 fue desarmado y devuelto a su propietario.
Cabo de Home. Autor desconocido.
(1) Como caso fuera de lo común, aunque no fue el único, éste oficial al producirse el alzamiento, se encontraba por ser supernumerario fuera de España, al llegarle la noticia de lo que sucedía, desembarcó del trasatlántico Alcantara (al parecer este buque pertenecía, a la naviera británica Royal Mail Steam Packet Lines, hubo uno anterior, hundido en la 1ª G.M. como crucero auxiliar) éste era el segundo (también fue crucero auxiliar en la 2ª G.M.), realizando viajes desde su isla, a Argentina, Brasil, Portugal y otros puertos, muy posiblemente tocara por costumbre en Vigo y fue el primer medio de transporte que pudo conseguir, y curiosamente esta naviera todos los nombres de sus buques, comenzaban por “A”, al entrar en Vigo el 10 de agosto de 1936, desembarco y se presentó a sus jefes, siendo nombrado en septiembre seguido comandante de éste buque (Cabo Home), pero estuvo poco tiempo por ser piloto de la Aeronáutica Naval, entregándole el mando de un hidro Savoia, permaneciendo un tiempo en los vuelos de avistamiento de otros buques, y así servir a la Marina a localizarlos mejor, poco después paso a la dotación del acorazado España 2º, del que se salvó al ser hundido por tocar mina propia, regresando a su puesto de piloto, como segundo comandante en el Mediterráneo, en la escuadrilla de hidros Heinkel, pasando más tarde como comandante militar del Marqués de Comillas, y luego del Mar Negro (este cargo era, como jefe de seguridad interna, al mando de una sección o dos, por si había algún tipo de deserción o intento de pasarse al enemigo, a su vez era el responsable si el comandante del buque, lo enviaba como jefe de alguna dotación de presa) un tiempo después fue nombrado 2º comandante del destructor Huesca, en el que termino la guerra.
Desplazamiento: 229 tn. Dimensiones: Eslora 36’90 por 9
de manga y 4 metros de calado. Máquina: Motor diésel de 350 C.V. Velocidad:
máxima de 7 nudos.
Era un motovelero que se encontraba en construcción en Palma de Mallorca, por ello al ser votado fue incautado por los sublevados y, armado con un cañón Nordenfelt de 57/37 mm, un Vickers 47/50 mm y una ametralladora Rheinmetall 20 mm, quedando asignado a las fuerzas navales con base en Palma, como a tal bou, entregando el mando al alférez de fragata de la Reserva Naval D. Gabriel Caplluch Mitean, quien permaneció entre el 10 de febrero de 1937 y el 4 de abril de 1938, siendo relevado por el alférez de navío de la Reserva Naval D. José Corral Puig, fue a su mando cuando realizó el primer viaje, como transporte de bidones con gasolina a Vinaroz, entrando en el puerto la noche del 25 al 26 de abril de 1938, para abastecer a las lancha torpederas allí destinadas.
Al regresar el 27 de abril fue relevado y nombrado su Comandante, el alférez de fragata de la Reserva Naval D. José Gómez Nuche, quien continuo en su cometido anterior y en muchas ocasiones; la base de Vinaroz estaba aislada, teniendo muy poca sonda, de ahí la necesidad de emplear pequeños buques para su abastecimiento, incluso se transportaban bombas de aviación para la Legión Cóndor e igualmente combustible para sus aviones, llegó a realizar 35 viajes en este comisión, pues continuo con ellos incluso después de ser tomada Castellón, siendo su fin el 1 de septiembre de 1938, cuando fue bombardeado por la aviación gubernamental y hundido, su dotación y comandante fueron rescatados, pasando a entregarle el mando el 6 de septiembre seguido de otro buque de transporte. Había pocos buques, pero siempre faltaban mandos.
Desplazamiento: 203 t. Dimensiones: Eslora 35’05 por 8’60
de manga y 3’10 metros de calado. Máquina: Motor diésel de 190 C.V. Velocidad:
máxima de 5 nudos, encargado por la Naviera Mallorquina.
Era un motovelero, que se encontraba en Palma de Mallorca, donde fue incautado por los sublevados, fue armado con un cañón Nordenfelt de 57/37 mm y un Vickers 47/50 mm.
Se le entregó el mando al alférez de navío de la Reserva Naval D. Guillermo Sora, pasando a prestar sus servicios como bou y a su vez, dada su poca velocidad se le utilizó como transporte, de gasolina en bidones entre su puerto base y Vinaroz, más tarde a Tarragona y Castellón, para abastecer a las tropas del ejército, al concluir la guerra fue desarmado en Cadiz y devuelto a su propietario.
Desplazamiento: 177’75 tn. Dimensiones: Eslora 31 por 8’70 de manga y 3’30 metros de calado. Máquina: Motor diésel de 200 C.V. Velocidad: máxima de 12’5 nudos.
Era un motovelero con base en Palma de Mallorca, al producirse el alzamiento, fue incautado por los sublevados, siendo artillado con un cañón Nordenfelt de 57/37 mm, pasando a presar sus servicios como a tal bou, pero por sus formas y espacio, aparte de vigilar era utilizado para transportar bidones de combustible, a las tropas de la península, tanto a Málaga, como más tarde a Vinaroz, Castellón y Tarragona, no participó en ningún mal encuentro, de ahí la falta de noticias sobre él, al finalizar la guerra fue desarmado en Cadiz y devuelto a su propietario.
Construido por Trawler Builders Cook Welton & Gemmell
en Beverley. Reino Unido, 1918.
Desplazamiento: 291 tn. Dimensiones: Eslora 38’60, por
7’12 de manga y 4’12 metros de calado. Máquina de vapor con 480 C.V. y caldera
de 12 kg. Velocidad: máxima 10 nudos. Armado con un cañón Vickers de 76’2/50 mm
y una ametralladora Breda de 13’2 mm.
Era el patrullero HMS John Baterman, en 1920 se le renombró HMSAnderby, en 1921 fue comprado por el armador español Pesquerías Cantábricas, quien lo renombró Pesquerías Cantábricas nº 1, al producirse el pronunciamiento se encontraba en Cádiz, quedando del lado sublevado, fue incautado y armado en Matagorda, pasando de inmediato a la flotilla del Estrecho, donde permaneció con el nombre de Cantábrico hasta finalizar la guerra, siendo desarmado en julio de 1939 y devuelto a su propietario.
Sobre éste buque no se encuentra nada más, sólo que en alguna ocasión se le denomina como Cantábrico nº 1, pero tampoco hay noticias sobre su vida en este periodo de tiempo.
Construido por The Lytham Shipbuilding and Enginerring
Co. Ltd. Lytham. Reino Unido 1918.
Desplazamiento: 300 tn. Dimensiones: Eslora 26’72, por
6’88 de manga y 3’36 metros de calado. Máquina: Compound vertical de 2
cilindros con calderas cilíndrica multitubular a carbón con 450 C.V. Velocidad:
máxima 10 nudos.
Armado con un cañón Nordenfelt de 57/37 mm. Fue comprado en diciembre de 1922 junto a sus hermanos, los Gaditano y Ferrolano, eran remolcadores de la Marina, pero armados desde la guerra de África; el 12 de febrero de 1928, se le monta una T.S.H. nueva.
Al producirse el alzamiento se encontraba destinado, en la Escuela de tiro Naval Janer, sita en Marín, al mando del alférez de navío D. Federico Sánchez-Barcáiztegui Aznar, quedando por los sublevados, pasando a prestar apoyo artillero entre el 6 y 20 de agosto de 1936, al avance de las tropas por la costa de Asturias, al regresar a Ferrol su comandante fue cesado por pasar a tomar el mando del remolcador Galicia. (1)
No hay más noticias sobre él, hasta el 11 de julio de 1938, cuando se le entrega el mando al teniente de navío D. Federico de Salas Pintó, quien permaneció hasta finalizar la guerra, quedando asignado el remolcador a la Marina de Guerra, con base en Ferrol.
(1) El año que no se tienen noticias de él, pensamos fue por quedar asignado al tren naval de Ferrol, porque también eran necesarios ciertos medios en la base durante toda la guerra.
Desplazamiento: 125 tn. Dimensiones: Eslora 21’40, por
5’20 de manga y 2 metros de calado. Maquina: vapor con caldera de 12’6 kilos,
proporcionando 100 C.V. Velocidad: máxima 8’5 nudos. Su rastra era alemana.
Al producirse al alzamiento se encontraba faenando en
aguas de Palma, por ello se unió a los nacionales, fue armado pero sólo con dos
ametralladoras, por su poco desplazamiento fue utilizado como aviso, hasta que
al ser necesarios los rastreadores (dragaminas) se le montó el sistema, pasando
conforme se iba conquistando terreno, en la costa Mediterránea a limpiar de ellas
sus aguas, para la libre utilización por los buques.
Permaneció en sus comisiones, hasta que el 16 de diciembre de 1938, se da la orden de dividir a los bous en dos divisiones de cinco unidades, cada una se distinguía a su vez por dos letras, la segunda llevaban las “P V”, siendo su base Vinaroz y pintar letras en los bous bien visibles, para mejor ser identificados, quedó en ésta flotilla, con la letra “Z”. Continuo su trabajo después de terminada la guerra, hasta dejar libre de minas toda la costa española, al concluir su labor fue devuelto a su propietario.
Desplazamiento: 115 tn. Dimensiones: Eslora 23’5 por 5’6 de manga y 3’85 de calado. Máquina: Motor diésel de 233 C.V. Velocidad: máxima 9’5 nudos. Armamento: un cañón Nordenfelt de 57/37 mm y una ametralladora Maxim de 37 mm. Hermano del Cabo de Home.
Fue construido por encargo de la empresa C. Constante Freire Vega de Vigo. Al producirse el alzamiento fue incautado por los nacionales, pasó a Ferrol donde fue armado, siéndole entregado el mando al alférez de navío D. Pedro Antonio Cardona Rodríguez, continuando sus servicios en las rías bajas gallegas, con base en Vigo, al concluir la guerra en el Cantábrico fue desarmado y devuelto a su propietario.
Construido por Rickmers en Bremenhaven. Alemania, 1916.
Desplazamiento: 262 tn. Dimensiones: Eslora 37’1, por 6’9
de manga y 3’95 metros de calado. Máquina: Motor de triple expansión con 204
C.V., caldera de 12 kg. Velocidad: máxima 9 nudos. Armamento: un cañón Vickers
de 76’2/50 mm y otro Nordenfelt de 5737 m/m, más una ametralladora Rheinmetall
de 20 mm.
Patrullero alemán, entregado a la Royal Navy al finalizar la 1ª G.M., donde se le renombró HMS Gros Beak, permaneció pocos años en esta marina, y al ser desarmado se puso a la venta, fue comprado en 1923 por el armador español Pesquera de Erandio, S. A., quien se lo cedió a la empresa Carranza de Cádiz, quien lo renombro José Ignacio de Carranza, al comenzar la guerra civil fue incautado por los sublevados, pasando a ser armado en Ferrol a mediados de agosto de 1936, con las piezas y dotación del Txit-Ona, y renombrado Ciriza nº 4, al completar el armamento se le entregó el mando al teniente de navío D. Manuel Seijo López.
Al amanecer del 20 de agosto se presentó el Jefe de la Escuadra Nacional en Ferrol, para reunirse con los comandantes de los bous, éste, Tritonia y Santa Urbana, dándoles ánimos ante la adversidad y sobre todo por la falta de buques, de ahí el interés de la reunión para levantar la moral, el 7 de septiembre los cuatro bous, de la recién creada base de Ribadeo, consiguieron apagar con sus fuegos, la batería situada en la desembocadura del río Nalón, seguido apresaron entre todos al vapor Ulía, de 2.435 TRB, al ser clasificado como buena presa, pasó a ser renombrado Castillo Morella.
A primero de septiembre quedo incorporado a la flotilla de Ribadeo, el 11 de septiembre participó en la captura del Alfonso Senra, de 6.530 tn de desplazamiento, transportando 1.000 tn de víveres con destino a Gijón, junto a su compañero el Argos P-32, quien pasó una dotación de presa para conducirlo a Ferrol, donde entro el 12 seguido; el 19 de septiembre junto al Galicia, contribuyo al hundimiento del sumergible B-6, del que rescato a siete de sus tripulantes, recibiendo la orden del destructor Velasco, para junto a su compañero arribar a su base en Ribadeo, al mismo tiempo que el Denis y Virgen del Carmen, arrumbaran a Pasajes, porque desde el 12 anterior ya estaba en poder de los nacionales, el 13 seguido salieron de su base para dar escolta al acorazado España 2º, más el destructor Velasco, para bombardear entre todos Gijón, regresando dos días más tarde a su base.
El 19 estaban en rumbo a Santander y Bilbao dando escolta al destructor Velasco, por ser el encargado de minar estos puertos, le daban escolta éste y el Galicia, cuando a las 08:30 a 25 millas de cabo Blanco al 020, el destructor avisto en el horizonte un sumergible, aumentando la velocidad a 25 nudos y proa al avistado, pero aun estando lejos se vio desaparecer la vela del sumergible, por ello regresó a su rumbo inicial, llegando a sus compañeros a las 11:15, para evitar ser conocido su avistamiento, hasta no estar a la voz, no comunico a estos el avistamiento, por ello debían estar muy atentos.
Lo estuvieron tanto que el Galicia a las 12:30 navegando al 070 a 15 millas al N. de cabo Peñas, navegando su compañero tres millas por su proa, el comandante del remolcador Galicia aviso de nuevo la presencia del sumergible, avistado por su popa, dando comienzo la caza del sumergible, que no fue otro que el B-6, el cual resulto hundido, fue éste quien recogió siete tripulantes, mientras el Velasco recupero a catorce embarcados en su bote, y directamente otros trece a los que previamente se les lanzaron salvavidas, ordenando el comandante del destructor que los dos bous, rumbaran o a su base, porque él había sufrido un abordaje con el Galicia, como consecuencia se abrió una vía de agua, por encima de la flotación y quedo casi inutilizado el tren de lanzamiento de minas, viéndose obligado de arribar a Ferrol para ser reparado, suspendiendo la primera orden del minado.
El 20 seguido recibo aviso de la presencia de dos sumergibles, por ello salió de Ribadeo junto al ArgosP-32 y Juan Ignacio con rumbo al lugar predeterminado, separándose para cubrir más mar, no encontrando a nadie, pero en la mañana del 21 avistaron, no a dos, sino a cuatro, pero a su vez vistos por ellos se sumergieron, resultando imposible saber dónde se encontraban, pasando a continuar en su vigilancia; esta misma noche, se avisó desde Cádiz el paso de la escuadra gubernamental con rumbo al Cantábrico, por esta razón y al no tener defensas suficientes para defenderse de un ataque, sobre todo por la presencia en la escuadra del acorazado Jaime I, se dio la orden desde Ferrol de pasar todos los bous a éste arsenal, saliendo de Ribadeo el 22 continuo, entrando en Ferrol el 23 por la mañana.
La flotilla al mando del teniente de navío D. Manuel Seijo López, comandante del Tritonia, y sus compañeros Ciriza nº 4, Santa Urbana y Juan Mari, a los que se añadieron el Chamorro, Cabo Home, Torpedero nº 2y el destructor Velasco, permanecieron vigilantes de las rías altas, por el peligro que representaba la existencia en estas aguas, de los cuatro sumergibles y tratar de impedir fuera atacada la base de Ferrol, en una de sus salidas la flotilla el 15 de octubre, apreso al bacaladero-patrullero vasco Galerna, al ser apresado transportaba 50 pasajeros, correspondencia y 300 tn, de sal, habiendo realizado varios viajes entre Bayona y Bilbao, éste buque prestaría grandes servicio a la causa nacional.
El 19 de octubre, la Flota gubernamental cruzo la mar frente a Ferrol, se supo por el avistamiento de un avión, a más de 100 millas de distancia de la costa, por ello salieron con rumbo al Cantábrico todos los buques, entrando el Ribadeo los de la 1ª Flotilla, mientras el España 2º y el mercante armado Dómine, pasaron a cruzar por estas aguas, y el mismo día estos capturaron a los pesqueros Apagador y Musel, siendo conducidos a Ribadeo, a esto se sumó la orden del almirante de Ferrol, de salir todos a cruzar las aguas entre el 29 de octubre y el 2 de noviembre, esto dio por resultado el apresamiento de los mercantes Manu y Arate-Mendi, devolviendo con ello la presión sobre el enemigo, de hecho se produjo una subida de moral en las tropas del ejército nacional, así como todo lo contrario en las autoridades vascas, pues al ser capturado el último, se oyó por la radio: «Nos han j…… la papeleta. No hay nada que hacer.» Palabras muy expresivas del porvenir en la zona.
El 27 de noviembre de 1936 ceso en el mando del buque, por enfermedad y de la flotilla el teniente de navío D. Manuel Seijo López, siendo nombrado el teniente de navío D. Francisco Núñez Olañeta, comandante del bou y la flotilla se entregó el mando al teniente de navío D. Victoriano Sánchez-Barcáiztegui y Aznar.
Por un tiempo, desde la fecha anterior hasta principios
de enero de 1937, permanecieron formando barreras para divisar buques, y al
mismo tiempo dar escolta al destructor Velasco, en sus minados de
diferentes puertos; estos se hacían de noche, siendo las más utilizadas las de
sin Luna y con condiciones de mar favorables, (como se ve no era tan fácil
realizar el trabajo) para saber exactamente donde se habían fondeado, todo ello
en un mar ya de por si casi siempre (y máxime en estas fechas del año) muy
alborotado, a todo ello se añadía que ni los mismo comandantes eran conocedores
de la fecha, para impedir fueran descubiertos por el enemigo.
El 9 de enero formó barrera, siendo apresado el mercante
soviético Smidovich de 2.485 TRB,
transportando 3.281 tn de trigo y un resto de lentejas, siendo buena presa, se
le nombró en principio Pasajes, pero
más tarde se convirtió en el Castillo
Peñafiel (éste fue uno de los que participó en el intento de desembarco en
Cartagena, el 5 de marzo de 1939 y lo paso muy mal, por no llevar ni siquiera
medios de comunicación) el 15 en otra barrera, por saber el posible arribo de
varios mercantes, entre ellos destaca el Sil,
con carga de guerra embarcada en Nueva York y Veracruz, quien utilizaba
indistintamente bandera italiana con el nombre de Sile, o alemana como Brasile,
pero de nada le sirvió, pues fue avistado y capturado, entrando en Ferrol,
donde al ser descargado se encontraron: 2.000 fusiles, 8 millones de cartuchos,
24 cañones, 15.000 granadas, 100 ametralladoras y carga general con 2.000 tn,
no eran falsas la noticias. Pero en la segunda quincena de enero, se vieron
obligados a refugiarse, por estar la mar arbolada siendo imposible soportarla
por buques tan pequeños.
Al pesar del continuo mal estado de la mar, cuando éste
lo permitía salían para formar las ya famosas barreras y apresando o
contribuyendo, a que sus compañero apresaran varios buques más, como la llevada
a buen término entre el 11 y 15 de febrero, con buenos resultados, el 1 de
marzo volvió a formar barrera, pero de nuevo el mar se alteró, causándole
averías, viéndose obligado su comandante a arribar, pero estando sobre La
Estaca, divisó al vapor abanderado danés, Birgit
quien había salido de Gijón con destino a Barcelona con carga de carbón, entrando
ambos en Ferrol el 3 seguido.
El 17 de abril de 1937 ceso en el mando el teniente de navío D. Francisco Núñez Olañeta, pasando a serlo el teniente de navío D. Pedro Cardona Rodríguez, el 6 de mayo junto a sus compañeros, pasan a estar vigilantes entre Ribadeo y Avilés, por orden se les destina a ambos, junto al Fantástico, quedando incorporados a Pasajes, junto a los dos primeros de esta base, Virgen de Icíar y Alcázar de Toledo, en este traslado fueron escoltados por el crucero Almirante Cervera, a quien de paso se le prestaba apoyo contra-sumergibles.
El 16 de junio de madrugada participo junto a su
compañero y el Galerna, en el apresamiento del remolcador Ayeta-Mendi, vapor a remolque del anterior Itxaz-Ondo y el petrolero Gobeo,
con 3.000 tn, de petróleo, y 500 tn, de gasóleo, quienes intentaron llegar a
tierra navegando al O, pero fueron interceptados y con dotación de presa
entraban en Pasajes el mismo día, el 18 seguido estuvo bombardeando la
carretera costera con destino a Cantabria, por éste y su compañero, más el Galerna,
por la que huían miles de soldados y no tan soldados; al llegar a la punta de
Cerdigo, su batería de costa les respondió, pero las malas condiciones de
visibilidad impedían apuntar con certeza, por ello dejaron de gastar munición
por ambas partes, de hecho se advirtió que los vehículos que transitaban por la
carretera, al llegar a la zona batida siempre de noche, para no ser detectados
incluso, aunque muy peligroso, apagaban sus luces, el 19 entraban en Bilbao los
nacionales, razón por la que el tráfico en la dicha carretera aumentó, fue
entonces cuando el Galerna con su pieza de 101’6 mm, efectuó sobre ella seis
disparos, hasta entonces sólo había utilizado la de menor calibre, pero por recibir
la orden del Cuartel General del Ejército del Norte.
El 7 de julio participó en la entrega del petrolero Campoamor, de 10.900 TRB (1) al que después de pasarle una dotación de presa, entro en Pasajes, donde presto grandes servicios a la causa nacional, durante un tiempo no hay noticias sobre él, pero es seguro que seguía en servicio y con las mismas comisiones, el 19 de agosto por instrucciones del Comandante General del Departamento de Ferrol, estaba junto al Denis y Mercedes, entre Bilbao y la frontera francesa, para interceptar el tráfico, de pequeños buques, la mayor parte con personas que, no querían caer en manos de los nacionales; conforme iban avanzado las tropas por tierra, cada vez quedaba menos mar a vigilar, razón por la que el mando decidió relevar a su comandante, por el alférez de navío de la Reserva Naval D. Wenceslao Santos Mieytes, y por los golpes recibidos en alta mar cuando se entregó el Campoamor, paso a reparar en el mismo puerto de Pasajes, donde entro el 18 de agosto, permaneciendo en seco hasta el 15 de septiembre siguiente.
El 10 de octubre sucedió otro caso irritante, el mercante británico Bramhill, se encontraba intentando entrar en Gijón, pero justo a 3’5 millas de distancia de la costa, por ello impedía el apoyo desde el mar de los buques nacionales, el comandante de crucero Almirante Cervera, comunicó al contralmirante británico Calvert, con insignia en el crucero HMS Southamptom, que si proseguía en esa posición, bien la artillería de costa, bien la de uno de sus buques podría hacer blanco en él, y no por quererlo, sino porque la mar no es una base fija, y en el momento de abrir fuego, una simple ola podía variar la trayectoria del proyectil, pero el tal Sir no se dio por aludido, por no responder al menos algo, pero demostrando su buen talante, al insistir comandante del crucero nacional, respondió que: «como estaba en aguas internacionales, no podía obligarle a moverse», una más de estos hipócritas enemigos de España.
Entre el 12 y 14 seguidos el crucero se vio obligado a
abandonar la zona, por estar falto de combustible, arrumbando a La Coruña donde
recargo, pero antes de salir ordeno a los dos minadores y seis bous presentes,
extremaran las precauciones para evitar la entrada de los cuatro mercantes
británico, allí permanecían a la espera de bajar la guardia, el 20 el mercante
británico Stangrove, fue apresado a
2’5 millas de punta Coin, por el bou Alcázar de Toledo, el crucero
nacional se puso a rumbo y al llegar le dio la orden a Ciriza nº 4 de acompaña
la presa hasta Ribadeo, al medio día el crucero insignia británico apareció en
escena, comenzando a cruzarse varios mensajes entre ambos cruceros, el
comandante D. Manuel Moreu Figueroa,
ya algo enfadado le respondió que: «el
buque apresado, estaba a dos millas de tierra, y no era de recibo que Ud.
pusiera en duda los medios de medir distancias, de los buques españoles»
ante ello el británico pensó en otras cosas, como intentar seguir hablando y
ver si el mercante podía de nuevo desasirse de su apresador, pero el del Ciriza
nº 4, para impedirlo le lanzo un cable, quedando firmemente amarrado en
ambos buques, y recibiendo la orden de Moreu
de proseguir su rumbo a Ribadeo, a pesar de ello, volvió a insistir el
mencionado, pues basándose en la medición de un supuesto observador embarcado
en el mercante, se encontraban a 5 millas, a esto Moreu le respondió muy
firmemente: «No he conocido en esta
guerra a ningún capitán u observador que, admitiera nunca estar dentro de las
aguas territoriales de España», pero no fue el final.
Como el tema se alargaba, el británico puesto al día por
su antecesor, le recordó el apresamiento del Thorpebay, donde en parecidas circunstancias se encontraba éste
caso, y entonces como ahora, en el momento del apresamiento no estaba presente
el crucero español, por ello de nuevo se aprovechó de la duda existente, aparte
de amenazar con represalias si no le daba libertad al buque apresado, de hecho
el último mensaje del británico fue: «La
actitud caballerosa del capitán de navío Moreu del 3 de septiembre merecía la
debida fe en su palabra en esta ocasión. Se suponía que se estaba tratando
entre caballeros y por tanto, un caballero no debía dar fe a un Capitán truhan
de una naviera desaprensiva que fue lo que hizo el contralmirante Clavert
inspirado más en el pirata Drake que en otros prestigiosos almirantes que
llenaron de gloria las páginas de la historia naval británica.» Esto como
se sabe es una perfidia sin paliativos, Moreu
le volvió a dirigir la palabra, le dijo que: «le resultaba inapropiado que todo un contralmirante británico, hiciera
más caso a un capitán de la mercante que a él, cuando todos sabíamos que ese buque
sólo transportaba gente que huía de la guerra, pero no por ser combatientes,
sino por algo mucho peor.», le dio orden al bou para que soltara la presa y
saliera de las aguas españolas. Así se las arreglaban los indómitos, pero
siempre vencibles enemigos de España, todo porque esos refugiados no iban a su
país, sino a otros, (normalmente se devolvía a Francia) de ser lo primero no
hubieran actuado de esta forma, pero debemos aclarar que, a las personas no se
les dejaba entrar en su país, pero sí si estas llevaban metales preciosos o
dinero en cajas de madera perfectamente selladas, las cuales eran requisadas y
estas sí se desembarcaban en su “graciosa” isla.
El 21 de octubre por la mañana, el Ciriza nº 4, avisto un pesquero, cuando se acercaron su nombre era Katiuska, a su bordo un centenar de milicianos, quienes al estar casi abarloado abrieron fuego con sus fusiles, causando un herido, ante ellos la reacción fue inmediata, se separó a la máxima velocidad, y al estar fuera del alcance de sus armas, le amenazo con hundirlos, indicándoles que pasasen todos a proa, dejaran sus armas y regresar a popa, esto fue obedecido de inmediato, al mismo tiempo que advertía a sus compañeros de lo sucedido, y una vez solucionado el problema arrumbaba a Cudillero, para desembarcar al herido, fueron llegando sus compañeros para prestarle apoyo, al reunirse con el pesquero junto a los otros cuatro, con escolta del Tritonia y Tito, arrumbaban a Ribadeo, donde entraban el 23 seguido.
El mismo 21 entraban los nacionales en Gijón y con ello el frente del norte quedaba en sus manos, por ello éste bou pasó a alguna de las bases que se mantuvieron en este mar, donde por no ser ya necesario, por orden fue desarmado en abril de 1938 y devuelto a su propietario.
(1) Este petrolero tuvo una rocambolesca historia en estos momentos; al producirse el alzamiento se encontraba en Bilbao, por ello fue confiscado por el Gobierno de Madrid, realizo un primer viaje, saliendo de Bilbao el 20 de diciembre de 1936, arribando a Filadelfia para embarcar su carga, regresando con ella a su puerto de partida inicial, pero sin saber las razones permaneció cuatro meses fondeado, en un siguiente viaje cuando se encontraba cerca de su puerto base, fue avistado por el mercante armado Ciudad de Valencia, cuando intentaba entrar en Santander, pero al llevar bandera británica y su nombre era Pollux, no se le detuvo (ya sabemos cómo estaba la situación con los británicos), por ello el mercante armado le obligo a entrar en Le Verdum; pero la intención de su capitán D. José Izaguirre, se puso en contacto con los servicios de información de «Terminus», y desde aquí se dio la orden a un grupo especial, al mando del comandante Troncoso, quien envió en una lancha a los hermanos Goñi y seis falangistas, por saber que ese día la tripulación estaría en tierra de fiesta, lo abordaron y el capitán dio la orden a estos de zafar las estachas, pidiendo permiso a la capitanía del puerto para zarpar con rumbo a Londres, no se le puso impedimento y salió, al hacerlo vario rumbo a Pasajes, por ello el mismo 7 a las 19:00 se abarloo el Ciriza Nº 4, quien embarco una dotación de presa, poco después se enarboló la bandera nacional, a tan sólo tres millas del puerto francés, sabiendo que les perseguía un destructor francés, no miraron nada, lo que causo que al entrar por el mucho calado, el petrolero varara, debiendo esperar la pleamar para salir de su embarazosa situación, pero no fue la última, pues al estar ya en el interior del puerto a pesar de la pleamar volvió a varar, pero aquí ya sin riesgo ninguno, comenzando a trasbordar su preciada carga y cuando ya estuvo listo por estar más ligero de peso, se le atraco con la ayuda de dos remolcadores, posteriormente fue un buen buque de apoyo a las unidades navales nacionales, quienes lo utilizaron hasta finalizar la contienda, era de la empresa CAMPSA.
Construido por A. Hall & Co. en Aberdeen. Escocia.
Reino Unido, 1879.
Desplazamiento: 201 tn. Dimensiones: Eslora 42’27 por
6’44 de manga y 3’26 metros de calado. Máquina de vapor con 268 C.V. Velocidad:
máxima 10’5 nudos. Armado con dos cañones de Vickers 47/50 mm.
Airoso buque, con proa de botalón y palos, y guarda humos “en caída”, era un yate de recreo, pasando por varios propietarios, quienes sucesivamente lo nombraron, Najade, Queen Mary y Ucrania, con este último pertenecía al Marqués de Gironi de la aristocracia italiana, en mayo de 1910 lo compró la Isleña Marítima, para ser utilizado como buque correo entre Palma de Mallorca y Cabrera, siendo renombrado Ciudad de Palma; al ser comprada esta compañía por Trasmediterránea en abril de 1931, prosiguió sus derrotas, pero sucedió que tras el cambio de sistema de gobierno en España, había un buque en ésta compañía con el nombre de Príncipe Don Alfonso, viéndose obligados a renombrarlo, convirtiéndose en el Ciudad de Palma, por ello al de éste historial por la misma razón, se le renombró por el de éste historial.
Al producirse el alzamiento se encontraba amarrado en su lugar habitual en Palma de Mallorca, fue incautado por los nacionales y allí mismo se le armó, (por su desplazamiento, sólo con el armamento que se cita) entregando el mando al alférez de navío de la Reserva Naval D. José María Ardanza saliendo a patrullar. El 19 de octubre de 1936 fue comisionado, para arribar a Cabrera, al ser conocida la salida de los gubernamentales de la isla, donde recogió todo el material allí existente, (como si les sobrara) desembarcándolo en Palma, al ser declarada Palma como base del Cuartel General del Almirante Jefe de la Flota el 10 de octubre de 1937, fue uno de los que quedo afecto a ella, fue nombrado su comandante el alférez de navío de la Reserva Naval D. Luis Portugalete, prosiguiendo en su comisión de aviso hasta finalizar la guerra, pasó a Matagorda para ser desarmado y al concluir los trabajos se le entregó a su propietario, quien lo termino de remodelar en 1945.
Construido por Murdoch & Murray Co. Glasgow. Escocia.
Reino Unido, 1896.
Desplazamiento: 275 tn. Dimensiones: Eslora 40’90 por
7’30 de manga y 3’70 metros de calado. Máquina de vapor con 30 C.V. Velocidad:
máxima 10 nudos. Armado con un cañón Nordenfelt de 57 mm y una ametralladora
Breda 13’2 mm.
Era un barco de los prácticos de Liverpool, con el nombre
de Lonard Spear, fue comprado el 5
de diciembre de 1911 por Marítima Mahonesa, quien lo renombró Ciudadela, salió de su puerto base con
rumbo a Barcelona, pero le sorprendió un duro temporal, a causa de él consumió
todo el combustible, quedando a la deriva, fue avistado por el vapor Stephan el 21 de diciembre seguido,
quien le lanzó un cabo de remolque, pero tras seis horas de navegación se zafó,
y además el trozo aferrado al casco se enredó con la hélice, quedando de nuevo
a la deriva a unas 30 millas al norte de Quessant.
Al día siguiente el temporal amaino, por ello lograron deshacerse del cable, aunque había causado daños, algo más tarde fue avistado por el vapor alemán, R. Blumberg, quien le largo remolque, entrando el 23 seguido en Plymouth, donde fue repasado y reparadas su averías, al estar listo salió de nuevo a primeros de enero de 1912, con su dotación británica y rumbo al mismo puerto de destino, al llegar fue remozado por completo, con camarotes de primera y segunda, siendo renombrado con el nombre que consta en este historial, por su buen diseño en 1918 lo compró Trasmediterránea, destinado como “correíllo” entre Palma y Ciudadela.
Al comenzar la guerra fue incautado por el gobierno de Madrid, siendo uno de los que participó en el frustrado desembarco en Porto Pi, en una de sus salidas, el 12 de noviembre de 1936 fue apresado por el crucero Canarias, se le armó en la misma base de Palma, y nombrado su comandante el alférez de navío de la Reserva Naval D. M. Servera, al ser declarada Palma como base del Cuartel General del Almirante Jefe de la Flota el 10 de octubre de 1937, fue uno de los que quedo afecto a ella, pasando a cumplir con su comisión de vigilancia, por ello participo en varias de las barreras, para interceptar mercantes con destino sobre todo a Barcelona, a pesar de pertenecer a Palma, su base era Sóller para facilitar sus salidas y cortar el paso a los posibles mercantes con destino a la ciudad citada, a su vez participó al final de la guerra, en la toma de Menorca el 8 de febrero de 1939, al concluir el conflicto paso a Matagorda, donde fue desarmado y devuelto a su empresa propietaria.
Construido por Astilleros Niclausse. En el río Sena.
Francia.
Desplazamiento: 150 tn. Dimensiones: Eslora 24’50 por 6
de manga y 2’73 metros de calado. Máquina de vapor alternativa con 300 C.V. a
carbón. Velocidad: máxima 11 nudos. Armamento: un cañón Vickers de 76’2/50 mm.
Comprados los ocho por R.D. del 6 de mayo de 1924, por la
necesidad de buques pequeños a causa de la guerra de África, fueron
clasificados como guardapescas.
En zona sublevada quedaron sus hermanos:
Cabo 1ª de
Infantería de Marina Garciolo.
Contramaestre
Castelló.
Fogonero Bañobre.
Maquinista Macias.
Marinero Jarana.
El devenir de todos ellos durante la contienda, fue prestar servicios propios de guardacostas, sin ninguna mención especial, al parecer sólo servían como “ojos” de la flota, tanto durante la campaña naval en el Norte, como más tarde en el Estrecho.
Al finalizar la contienda fueron asignados a diferentes puertos, donde continuaron sus servicios, algunos de ellos hasta casi entrados los años 70.
Construido por Hepples, en Shields. Reino Unido, 1919.
Desplazamiento: 276 tn. Dimensiones: Eslora 37’19 por 7’50
de manga y 3’80 metros de calado. Maquina: Alternativa de triple expansión con
384 C.V., con calderas a carbón de 12’6 kg. Velocidad: máxima 11 nudos.
Armamento: un cañón Vickers de 76’2/50, un Nordenfelt de 57/37 mm y una
ametralladora Maxim.
Encargado como patrullero para la Royal Navy, con el
nombre de HMS John Clavell, pasando a ser desarmado y convertido en
pesquero, en 1929 fue comprado por un armador de La Coruña, renombrándolo con
el de este historial, al producirse el alzamiento era de los buques disponibles
de la Marina, fue el primero en ser requisado por los nacionales, y a finales
del mismo julio de 1936 ya estaba armado y numerado como P-21, siéndole entregado
el mando al teniente de navío D. Manuel
Aldereguía Amor, por ello el primero de los bous nacionales en entrar en
acción.
El 19 de agosto de 1936 el acorazado España 2º, bombardeo con 20 disparos, las proximidades de Guadalupe, de donde recibió dos proyectiles que cayeron al mar en su estela, arrumbando al cabo Peñas, donde le esperaba el crucero Almirante Cervera y éste bou, llegando en la madrugada del 20, el recién nombrado Almirante Jefe de la Escuadra Nacional, por otra parte casi inexistente; al amanecer trasbordó a un bote del acorazado, para trasladarlo a bordo del Denis, donde se reunieron los otros dos comandantes el del Tritonia y Ciriza nº 4, para darles apoyo a los tres y que a pesar de los pocos medios, nadie dudara nunca de su efectividad, con ello levantó la moral de sus dotaciones, volviendo a embarcar en el bote por la tarde y regresar al acorazado, quien arrumbo a Ferrol donde entró el 21 seguido.
Al desembarcar del bou el Almirante, se dio la orden a éste y el Tritonia de acercarse frente a Gijón, porque el crucero Almirante Cervera debía acudir a dar apoyo con sus fuegos, a las tropas que avanzaban por la carretera de la costa, para intentar liberar Gijón, mientras los bous con su pobre artillería proteger, a los defensores de los cuarteles entre ellos el de Zapadores, asediados por los gubernamentales, el mismo 20 a las 14:00 el Denis pidió apoyo al Almirante Cervera, para dar caza a un mercante proveniente del oeste, quien por ser más rápido que él no podía pararlo, e intentaba entrar el Gijón, el crucero vario rumbo al lugar, donde pocos minutos después estaba a la vista, efectuando un par de disparos de aviso, el vapor hizo caso omiso e intento varar, aconchándose sobre la costa, entre cabo Peñas y Avilés, donde ya sin remedio por estar algo cerca el crucero, envío un bote con dotación de presa, siendo abordado.
Era el Arriluce
un carbonero propiedad de la Marítima Catalana S.A. con matricula de Bilbao,
pero en esta ocasión embarcaba 50 cajas de municiones para el Mauser de 7 mm,
15 cureñas para cañones de 76/2 mm, más algunas con víveres; las cureñas eran para
los cañones construidos en Reinosa (Santander) por la misma S.E. de
Construcción Naval, el mal estado del casco al ser revisado y comprobar su
carga, obligo a apresar al capitán y varios tripulantes que no pudieron saltar
a tierra, quienes embarcaron en el bote, del que se hicieron cargo los dos
bous, mientras el crucero abría fuego sobre el mercante para evitar que la
carga llegara al enemigo, a pesar de ello varias de la cureñas sí pudieron ser
recuperadas por quienes las habían pedido, al concluir todo este incidente, los
comandantes de los bous, fueron felicitados por el del crucero.
El 3 de septiembre, participo en la persecución del
sumergible C-5, junto a prácticamente la mayor parte de las flotillas de
bous, pero su poca velocidad y ningún sistema a bordo para localizarlo, pudo
llegar a su destino entrando en el puerto de Bilbao, pero si causo muy mala
impresión en el comandante y dotación, por la forma y cantidad de buques que le
persiguieron, lo que significó una muy fuerte bajada de moral el fracaso.
El 13 de septiembre fue tomada por los nacionales la ciudad de San Sebastián, recibiendo la orden de pasar a la nueva base de Pasajes, los bous Virgen de Icíar, Alcázar de Toledo, Denis y Virgen del Carmen, por ello los nueve bous dieron escolta al acorazado, quien bombardeo objetivos militares de Gijón, con once proyectiles de 304’8/50 mm y veinticinco de 102’6 mm, lo curioso y por ello debe resaltarse es que, para dar escolta al acorazado, por la falta de unidades navales adecuadas, se recurría a los bous, quienes ni siquiera lograban mantener la velocidad del protegido, por ello en varias ocasiones el acorazado los dejaba atrás.
El 19 siguiente, formo parte de los que hundieron al sumergible B-6, regresando para recargar combustible junto a su compañero el Virgen del Carmen, entrando en Ribadeo el mismo día por la tarde, el 20 se recibió la orden general, para que todos los bous pasaran a Ferrol, por haberse confirmado que pronto estaría la Flota gubernamental en estas aguas, encabezada por el acorazado Jaime I, por ello había que ponerse a salvo, ya que ni la base podía de lejos ser segura, salieron el mismo día de noche y entraron en el puerto ordenado el 22 por la tarde.
Al pasar el peligro regresaron a su base, por ser
avistada la Flota gubernamental por un avión, a más de 100 millas de la costa
de La Coruña, comenzando de nuevo a vigilar la mar, el 15 de octubre de 1936,
fue apresado el Galerna, por la flotilla de bous nacionales con base en
Pasajes, fue avistado por estos a las 15:00, la flotilla la componían el Alcázar
de Toledo, al mando del alférez de navío don Javier Saldaña Sanmartín, Virgen
de Icíar, al mando del teniente de navío don Ángel Bona Orbeta, Denis, al mando del teniente de
navío don Manuel Aldereguía Amor y Virgen
del Carmen, al mando del teniente de navío don Francisco Javier Quiroga Posadas, siendo abordado por una dotación
de presa del Alcázar de Toledo, para marinarlo al puerto base de la
flotilla, pasando el 30 seguido a Ferrol, volvió a salir con rumbo a su puerto
base, estando de tránsito, apresó al Gazteiz
y poco después el Isla de Tenerife.
Participando en varios apresamientos y sobre todo, los
enfrentamientos con los marinos de la Royal Navy, sufriendo el 5 de diciembre
la pérdida de su compañero Virgen del Carmen, al sublevarse la
dotación, siendo apresados su comandante el teniente de navío D. Francisco Javier Quiroga y Posadas y su
jefe de máquinas D. Cándido Pérez Expósito,
quienes fueron fusilados por traidores, tras un juicio de guerra, lo que significó
una pequeña bajada de moral, pero al mismo tiempo un revulsivo, para no dejarse
capturar y menos aún vivo.
Entre el 5 y 9 de marzo de 1937, permaneció en una
barrera junto a los de su flotilla, pero al que esperaban fue capturado por el Galerna,
(éste por ser un bacaladero tenía más velocidad, y se le armó muy rápidamente,
por ser muy necesario) al saber la noticia regresó a su base, continuo con sus
salidas y barreras, todo porque en esta época no existía el radar, y por ello
no había otra forma de avistar buques que, navegar alejados entre ellos al
menos unas 25 millas, yendo en forma de escalones en su navegación, para cubrir
más mar y poder cumplir con sus limitadas fuerzas, a que otros más rápidos y
mejor armados, pudieran darle caza, esto siempre que la mar lo permitiera, pues
en varias ocasiones estos pequeños buques, se veían en la obligación de
protegerse, e incluso arribar a algún puerto cercano, lo que era factible al
progresar las tropas por tierra, facilitando poder entrar aunque fuera un lugar
pequeño.
El 29 de marzo al salir de las aguas francesas, hundió al
Mar Caspio por no obedecer sus
órdenes, continuando en sus barreras apreso el 20 de abril, al vapor con
bandera danesa Esther Mary por el Galerna,
quien había salido de Bayona con intención de arribar a Bilbao, pero el
patrullero se lo entregó a éste y lo condujo a Pasajes, en la primera semana de
mayo, el patrullero, éste y el Alcázar de Toledo, a petición del
mando, bombardearon unos objetivos militares en cabo Machichaco.
Al entrar los nacionales en Bilbao el 19 de junio, fue el
primero que entró en el puerto, donde quedó asignado como su base; entre el 4 y
6 de julio, volvió a otra de sus barreras, siendo como casi siempre desde su
incorporación el que hiciera la captura el Galerna, del Liberte, un carguero pequeño con sólo 305 tn. de registro, con
bandera francesa, quien ya había estado cruzando, entre puertos franceses y
españoles en varias ocasiones, pero otra vez el patrullero le entregó la presa,
para dejarlo a salvo en Pasajes, a primeros de agosto, se nombra su comandante
al teniente de navío D. Ángel Bona Orbeta.
Para dejar muy claro cómo funcionaba la Royal Navy, el 14 de agosto de 1937 el crucero Almirante Cervera, intercepto un mensaje del HMS Fearles a todos los buques de su bandera, el cual decía: «Conocedores de la negativa francesa de admitir a más refugiados españoles, es preciso que salgan todos los buques de estos puertos, porque tampoco pueden ser desembarcados en el Reino Unido, por unirse a la decisión de Francia.» (Para más explicaciones, libritos de mano.)
El Denis con base en Bilbao, el 18 de agosto se encontraba en la mar, para tratar de capturar buques que salían de cualquier puerto de su zona de vigilancia, entre este día y seguido 20 apreso a cuatrocientos cuarenta fugitivos, el 22 se encontraba frente a Castro Urdiales, con su pareja el Mercedes, apresando a varios otros buques, transportando evadidos.
Entre el 22 y 25 permaneció en la mar, dando apoyo al crucero Almirante Cervera, éste apreso tres buques, un pesquero el Babiola Tarjón, el remolcador Arin-Mendi y el pesquero Virgen de los Remedios, todos ellos frente a Santander con evadidos del frente, incluso el remolcador con los directivos de la Naviera Sota y Aznar, a excepción del primero, quien por dar datos de la situación en la ciudad cántabra arrumbo a Bilbao, para conocimiento del comandante de Marina de la ciudad, los dos restantes le fueron entregados al Galerna y Denis, para a su vez conducirlos al mismo puerto, pero estos con escolta, (recordar que el 26 de agosto, entraban los nacionales en Santander), el mismo día se le ordeno junto a su pareja, ahora el Virgen de Begoña, para cruzar frente a Santoña, donde se le unió el Torpedero nº 7, y todos recibiendo el apoyo del crucero Almirante Cervera, viendo como el 27 siguiente entraban las tropas nacionales en la población de Santoña, a ellos unos días antes se había unido el minador Júpiter.
Los incidente con la Royal Navy no habían terminado, al parecer hubo un acuerdo de Aguirre (presidente vasco) con ellos, de hecho el 30 de agosto, el minador Vulcano, informaba que ese día frente a Santoña, estaban dos mercantes, el Marvia y Kenfigpool, un destructor también HMS, y otro francés, más el vapor español Arichachu, a su bordo con tropas, para desde Santoña sacar a todos los posibles combatientes y no tanto, en buques británicos, éste acuerdo conocido por «Terminus» lo desautorizo, dando la orden tajante de no salir nadie del puerto, sólo se autorizó la salida del mercante Bobie, con 533 heridos; como el problema aumentaba el 3 de septiembre se incorporó el Denis, pero esta vez al mando del teniente de navío de la Reserva Naval D. Juan Alsina Triado.
Entre tanto el Seven Seas Spray entro en puerto, pero al hacerlo fue asaltado por tropas nacionales, a su vez permanecían fuera de las aguas españolas los también británicos Marvia y Hillen, éste intento entrar, pero el minador Júpiter se interpuso y le obligo a salir, fue el 4 de septiembre cuando el almirante británico Mackinnon, con insignia en el acorazado HMS Resolution, pidió al capitán de su destructor HMS Foxhound, quien estaba en la salida del puerto de Santoña, ¿dónde se encontraba el Seven Sea Spray al capitán de navío Manuel Moreu Figueroa, comandante del crucero nacional, éste se puso en contacto con el Comandante General del Departamento Marítimo de Ferrol, quien le respondió al almirante inglés: «El vapor Seven Seas Spray está en Santoña» en esta respuesta es obvio no dice la verdad, pero al enemigo ni conversación y donde las dan la toman.
De hecho el comandante Moreu en su Parte de Campaña, escribió: «La verdad es que nos falta información.» refiriéndose al acontecer de estos días, porque no sabía lo que ocurría frente a este puerto, ni la causa de la presencia de tanto buque de guerra y mercantes de todo tipo, cuando la zona prácticamente estaba en manos nacionales.
Con el resto de compañeros, estuvieron vigilando entre Avilés, Gijón y Ribadesella, pero el continuo navegar, le obligó a regresar el 19 de septiembre a su base, entrando en Bilbao donde fue puesto en seco y permaneció en reparaciones hasta el 24 de octubre seguido, cuando al ser activado pasó a su flotilla, ésta permaneció en estas aguas, para impedir el paso por mar a Francia de refugiados, cubriendo por ello la zona costera entre Estaca de Bares y cabo Higuer, junto a sus compañeros Tito, Virgen de Begoña y los de la 1ª flotilla, Fantástico, Virgen del Carmen y el patrullero Uad-Martín, siendo el jefe de todos ellos el Álava, al mando del teniente de navío D. Victoriano Sánchez-Barcáiztegui Arnaiz, quien había tomado el mando de todos ellos el 26 de mayo de 1938, al no encontrar más datos, suponemos que transcurridos unos meses, sería desarmado y devuelto a su propietario, para con su trabajo aportar alimentos, porque en una guerra siempre es lo primero que falta, incluso el agua tan necesaria para vivir como vivir de ella.
Construido por The Lytham Shipbuilding and Enginerring
Co. Ltd. Lytham. Reino Unido 1918.
Desplazamiento: 300 tn. Dimensiones: Eslora 26’72, por 6’88 de manga y 3’36 metros de calado. Máquina: Compound vertical de 2 cilindros con calderas cilíndrica multitubular a carbón con 450 C.V. Velocidad: máxima 10 nudos. Armado con un cañón Nordenfelt de 57/37 mm.
Fue comprado en diciembre de 1922 junto a sus hermanos, los Gaditano y Cartagenero, eran remolcadores de la Armada, pero estaban armados desde la guerra de África, el 12 de febrero de 1928, se le monta una T.S.H. nueva.
Al producirse el alzamiento se encontraba incorporado en la Escuela Naval de Marín, quedando por los sublevados, entregando el mando al teniente de navío D. José María Saavedra Patiño, participó en la barrera para apresar al mercante Mar Cantábrico, al embarcar la dotación de presa, el buque estaba en muy mal estado, razón por la que se le dio la orden de remolcarlo a Ferrol, poco después se le ordenó pasar a Vigo, para dar resguardo a los pesqueros mientras faenaban, por ser el medio de vida para muchas familias, allí permaneció hasta concluir la guerra en el Cantábrico.
Recibió la orden de pasar a Cádiz, al llegar fue revisado y se nombró su comandante al teniente de navío D. Antonio Torres Menéndez, poco después pasó como dragaminas a Palma, participando en todas las barreras, para interceptar buques mercantes, encontrándose el 12 de diciembre de 1938 en Melilla, como era su trabajo, ayudo a desatracar al crucero Almirante Cervera, casi no se explica la razón, el caso es que el remolcador quedo atravesado y al ser abordado por el crucero, lo hundió, 14 de sus tripulantes fueron recuperados por la lancha del práctico y el R-15 (otro remolcador), por desgracia se sufrió la pérdida de 5 compañeros, pero de inmediato se puso en marcha la operación de rescate, por estar sólo hundido en una sonda de 12 metros, siendo el mismo R-15 y el comandante del remolcador quienes dirigieron el rescate, para ello fueron transportados en el mercante armado Rey Jaime II, desde Cádiz dos buzos para ayudar a su recuperación.
Al ser puesto a flote, con el mismo comandante pasó a Cádiz, donde de nuevo fue revisado por completo, saliendo con rumbo a Palma, donde entre el 31 de enero y 3 de febrero de 1939, formó parte del 6º convoy, con destino a Cádiz con materiales de guerra, embarcados en La Spezia. No hay más noticias sobre él, sólo que al terminar la guerra, fue desarmado y pasó a ser un remolcador de la Armada Española.
Añadir que por otras fuentes, se le da por hundido el 9 de diciembre de 1938, cerca de Melilla, cuando daba remolque al crucero auxiliar Mar Cantábrico, lo que no compartimos, por saber su presencia en el 6º convoy mencionado, a primeros de febrero de 1939.
Construido por N.V. van der Kuy & van der Ree’s
Machinefabriek en Scheepsweft, Róterdam. Holanda, 1918 con el nombre de Z.A.R.1. y entregado a la Royal Navy,
donde fue renombrado HMS Saint Clement.
Fue comprado y dado de alta en la Marina el 18 de febrero
de 1922, para servir como remolcador, siendo clasificado como R-5,
más tarde se le renombró con el que se indica en este historial.
Desplazamiento: 350 tn. Dimensiones: Eslora 30’65 (entre pp)
por 6’72 de manga y 3’52 metros de calado. Máquina de triple expansión a carbón
con 550 C.V. Velocidad: máxima 10 nudos.
Al producirse el alzamiento se encontraba en Marín, quedando
en el bando alzado, donde fue armado con un cañón Nordenfelt de 57/37 mm a proa
y un Vickers de 47/50 mm en popa. Sí consta en el anuario español de 1932 (el
primero que se editó en España y español).
Pasó a Ferrol y el 13 de agosto de 1936, fue nombrado su comandante el alférez de navío D. Federico Sánchez-Barcáiztegui Aznar, entregando el mando del Cartagenero, sale el mismo día de noche, por haber sido destinado a la base de Ribadeo, donde se le asigna el numeral P-41, aunque seguirá siendo conocido por su nombre, el 7 de agosto junto al Denis, por orden del comandante de crucero Almirante Cervera, bombardean para facilitar el avance de las tropas la población de Cadavedo y el 25 seguido recibe la orden de incorporarse a la base de Ribadeo.
El 3 de septiembre participo junto al Denis, en el intento de capturar al sumergible C-5, no consiguiendo el objetivo, el 7 seguido los cuatro bous consiguieron apagar con sus fuegos, la batería situada en la desembocadura del río Nalón, seguido apresaron entre todos al vapor Ulía, de 2.435 TRB., al ser declarado buena presa, se incorporó a la marina con el nombre de Castillo Morella.
El 19 de septiembre, junto al Ciriza, prestaron protección al destructor Velasco, al mando del capitán de corbeta D. Francisco Núñez Rodríguez, quien tenía como misión habiendo embarcado 40 minas para sembrar con ellas, los puertos de Santander y Bilbao, al encontrase a las 08:30 horas a 25 millas navegando al 020 sobre Cabo Blanco, desde el destructor se avisto un sumergible, su comandante dio orden de aproar a él, aumentando su velocidad a 25 nudos, transcurridos unos minutos desapareció de la superficie, por ello a las 09:15 regreso a su anterior rumbo, al llegar a la voz de su escolta a las 11:15 paso aviso a estos de su avistamiento, prosiguiendo a rumbo para minar las aguas de Santander, a las 12:30 vario rumbo al 090, para arribar a Bilbao, en este instante el comandante del Galicia, navegaba rumbo 070, a 15 millas al norte del cabo Peñas y a tres millas por su proa, y a otras tres a su babor al mismo rumbo el Ciriza.
De pronto desde el Galicia se divisó por su popa un sumergible, navegando a mucha más velocidad en superficie, al parecer con la intención de pasarle por la banda de babor, al encontrase a unos 5.000 metros, el Galicia hizo sonar su sirena alertando al Ciriza, pasados unos 15 minutos, el remolcador aproó al sumergible, sobre el que abrió fuego con su pieza de 57 mm, transcurridos unos minutos pudo apreciar haber dañado al sumergible, aunque éste hizo de nuevo inmersión muy rápidamente, el Galicia continuo a su rumbo de encontrada y al suponer (no había sonares) se encontraba sobre él, lanzo una carga de profundidad, pero no se obtuvo resultado favorable, lo que realmente sucedió fue que el comandante del sumergible, al decidir hacer inmersión dejo abierto en la vela la válvula del acústico, medio de comunicación con la cámara interior, por ello comenzó a entrar agua y esto es lo que asusto a su inexperta dotación y lo que quería conseguir, por ello muy rápidamente se dio la orden se soplar tanques, saliendo a superficie a unos 1.500 metros de distancia.
Al encontrase a unos 800 m. el sumergible abrió fuego con su cañón de 76’2 mm, de hecho recibió un impacto en el puente, otro en la rueda del timón, uno más en la tubería del pito, dañando la superestructura del remolcador, matando al sirviente de la pieza de proa, el marinero de 1ª José Naveira, al parecer el impacto fue directo porque su cuerpo fue partido en dos, más cuatro heridos leves, entre ellos el mismo comandante y el segundo oficial naval D. Manuel Anca; en el cruce de disparos el Galicia encajo otros cinco proyectiles, uno de ellos causo una vía de agua en la carbonera de babor, así como otro en la caldera, viéndose obligado a bajar la velocidad a 4 nudos, más otros tres heridos, como es natural en la dotación bajó la moral, por ello el comandante descendió del puente y dirigió el fuego de la pieza, al parecer con cierta precisión, el sumergible basado en su mayor velocidad se sumergió de nuevo; todo esto duro tres horas.
A las 14:30, el comandante del Velasco, capitán de corbeta D. Francisco Núñez Rodríguez, supo por telefonía el avistamiento del sumergible, virando con rumbo de encontrada al 270, aumentando su velocidad a 27 nudos, divisando una pequeña columna de humo a las 15:15, pasados unos minutos avisto a los dos bous y al norte de ellos una característica nube muy débil, propia de la exhaustación de los motores del sumergible, prosiguió a rumbo y a las 15:30 se distinguía el sumergible, huyendo con rumbo N. a unas 4 millas del Galicia, a las 15:40 con el telemetro del destructor, lo situó a 6.440 metros de distancia, el director de tiro era el alférez de navío D. Severo Martín Allegue, el comandante dio orden de abrir fuego, con su pieza de proa de 101’6 mm, logrando impactar con más de un proyectil, viéndose acorralado el sumergible izó bandera de rendición, por ello suspendió el fuego a las 15:47.
Llegó a la voz a las 16:00, dando la orden de cortar las comunicaciones, el comandante del sumergible, el alférez de navío D. Oscar Scharfhauser Kebbon, indicó tenía una vía de agua importante, pero aun así el comandante del destructor le dijo era necesario salvar el buque, a su vez dio la orden de arriar un bote, con personal especialista, estando al mando de su Segundo, teniente de navío D. José Jáudenes Junco, con la intención de abordar y salvar el sumergible, al mismo tiempo que se separaba el bote del casco del destructor, el sumergible comenzó a hundirse de popa, eran las 16:15 y la dotación del B-6 comenzó a abandonar el casco, el último en hacerlo fue su comandante, quien no había olvidado el libro con las claves reservadas de la nave.
Hundimiento y auxilio del submarino B-6. Autor desconocido.
Mientras tanto había llegado el Ciriza, quien al ver la traumática situación de los hombres en el agua, se acercaron para facilitar el embarque, al mismo tiempo y desde el destructor se lanzaron prácticamente todos los salvavidas, por ello en el bote embarcaron catorce de ellos, en el bou siete, los restantes treinta y seis, fueron recogidos por el Velasco, (1) sólo uno, no se sabe la razón, al ir a colocarse el salvavidas se hundió y no pudo ser rescatado, (puede pensarse lo que se considere, pero lo más probable es que fuera el comisario político y por ello prefirió la muerte honrosa, a ser pasado por las armas tras el consiguiente consejo de guerra) y a las 16:20 el sumergible desaparecía de la superficie del mar. (2)(3)
Un poco después arribaba el Galicia, abarloándose al destructor, para trasbordar a todos los rescatados, por los balanceos propios de la mar, estando en este trabajo, los dos cascos se golpearon, a causa de ello el destructor sufrió una vía de agua en su obra muerta, siendo inmediatamente taponada con coys y cemento rápido, a su vez por el mismo golpe, quedo fuera de servicio el tren de lanzamiento de cargas de profundidad, como consecuencia el destructor que pretendía minar Bilbao, decidió arrumbar a Ferrol, dando a su vez la orden al Ciriza y Galicia lo hicieran a su base en Ribadeo y a los Denis y Virgen del Carmen 1º, igualmente a Pasajes, nueva base de los bous nacionales, por haber pasado a sus manos el 12 de septiembre anterior.
El B-6 había salido de Cartagena el 14
de septiembre de 1936, con un cargamento de 700 cajas de 33 kilos de peso cada
una de municiones destinadas a Bilbao, siendo todo el viaje muy incómodo para
la dotación, por ocupar el espacio libre de tránsito para ellos.
Las bajas en el Galicia fueron: Los ya citados, más el cabo de artillería Jesús Paz, cabo de Infantería de Marina Eloy Rodríguez, cabo de marinería Luis Mella, marineros Fernando Landeira y Cipriano Purrua, el fogonero Juan Egea y el tercer maquinista, D. José Vilar Guerrero, quien se encontraba en Ferrol de permiso, aunque destinado en Cartagena en el sumergible B-1, quedando incorporado al remolcador.
El Galicia entró en su base de Ribadeo a reparar, pero se vio obligado a salir con rumbo a Ferrol, por recibirse en la noche del 21 de septiembre, el avisó desde Cádiz del paso de la escuadra gubernamental con rumbo al Cantábrico, por esta razón y al no tener defensas suficientes para defenderse de un ataque, sobre todo por la presencia en la escuadra del acorazado Jaime I, se dio la orden desde Ferrol de pasar todos los bous a este arsenal, saliendo de Ribadeo el 22 continuo, entrando en el Arsenal el 23 por la mañana, donde al llegar se puso en seco para continuar las reparaciones, no saliendo de nuevo al mar hasta finales de octubre.
Pero al parecer por las inmejorables condiciones de este buque, quedo en Ferrol para cumplir su principal comisión de remolcador, hasta que al finalizar la guerra fue desarmado y siguiendo su rastro, sabemos que el 9 de mayo de 1941, fue renombrado RR-11, lo que nos indica continuo sus servicios en la Marina.
(1) De los cuarenta y tres apresados que fueron juzgados por el tribunal compuesto por cinco oficiales de la Marina, tres fueron sentenciados a la pena capital, eran el 2º maquinista Juan Cumbreras González y 3º maquinistas Fernando de la Pascua Galiano y Andrés Navarro Barcelona, el resto cumplió pena carcelaria, pero cinco años más tarde, a pesar de estar condenados a perputa, fueron puestos en libertad.
(2) No en balde se efectuaron 153 disparos con el cañón de proa 57/37 mm y 97 con el de popa de 47/50 mm, y alrededor de 2.000 de ametralladora y fusil.
(3) Por los hechos narrados a su vez, el Jefe de la Flota, en uso de sus atribuciones, no dudo en conceder la Medalla Naval al alférez de navío D. Federico Sánchez Barcáiztegui Aznar, por Orden General del 21 de septiembre, confirmada por O.C. del 12 de octubre seguido, esta condecoración era igual a la Medalla Militar, justo por debajo de la Cruz Laureada de San Fernando. Al estar en guerra y los nacionales no disponer de la condecoración, al serle impuesta en su base de Ribadeo, por el jefe de la flotilla de bous allí estacionada, el teniente de navío D. Félix de Ozámiz Rodríguez, se quitó la suya ganada cuando el desembarco de Alhucemas y se la prendió en el pecho. No quedó aquí el tema, pues vista la causa en juicio contradictorio, (advertir y considerar que los hechos tuvieron lugar el 19 de septiembre de 1936, por ello llevó su tiempo el trámite, como suele ser normal en esta condecoración) a petición del Almirante Jefe de la Flota, se publicó en el B. O. nº 92 del 28 de octubre de 1938, pág. 1.512, la concesión al ya teniente de navío, de la Cruz Laureada de San Fernando de 2ª Clase, (la concesión de esta máxima condecoración, lleva consigo el ascenso inmediato al grado superior de quien la recibe) siéndole impuesta por el Jefe de las Fuerzas de Bloqueo del Mediterráneo, vicealmirante (estampillado) Excmo. Señor D. Francisco Moreno Fernández, en su cuartel general sito en la ciudad de Palma de Mallorca, estando presente todas las unidades de la escuadra con sus dotaciones.
Construido por Schiff Unterwese, en Wilhelmshaven.
Alemania, 1919.
Desplazamiento: 224 t. Dimensiones: Eslora 38’8, por 6’88 de manga y 2’8 metros de calado. Se desconoce tipo de máquina. Velocidad: máxima 9’5 nudos. Armado con un cañón Nordenfelt de 57/37 mm.
Era un pesquero, su nombre en origen era Emma Oetken, hasta que en 1922 fue comprado por el armador Carranza con base en Cádiz, quien lo renombró José de Carranza, un tiempo más tarde lo compro un armador de Huelva, quien le volvió a cambiar el nombre por Virgen de la Cinta nº 7, aquí se encontraba al producirse el alzamiento, por ello fue incautado por los sublevados y a su vez se le renombro con el de este historial, formando parte desde el principio de la flotilla de Huelva, donde continuo como base incluso al cambiar de nombre la flotilla, fue muy activo capturando a los mercantes Jam, Alix y Etrib a éste último lo tuvo que dejar marchar, porque un destructor francés indicó que la captura, se había realizado fuera de las aguas territoriales de España; se mantuvo en activo hasta ser dado de baja, por avería de máquinas en octubre de 1937, como siempre se hizo, le fue devuelto a su propietario. Lo que ignoramos es si con la avería solucionada o con ella.
Construido por Cochrane en Shelby. Reino Unido, 1916.
Desplazamiento: 324 t. Dimensiones: Eslora 41’30 por 7’20 de manga y 4 metros de calado. Máquina de vapor de 350 C.V., con una caldera de 14 kg. Velocidad: máxima 10 nudos. Armado con un cañón Nordenfelt de 57/37 mm.
Patrullero británico con el nombre HMSAnzac II, al concluir la Gran Guerra fue puesto a la venta, pero ya desarmado, lo compro en 1922 un armador español, quien lo renombró Canosa, dedicándose a la pesca, al producirse el alzamiento se encontraba en Cádiz, siendo incautado por las autoridades, siendo armado y saliendo por primera vez en abril de 1937, encuadrado en la flotilla de Estrecho, donde permaneció como a tal aviso hasta noviembre seguido, por no ser ya necesario, al haber finalizado la guerra en el Cantábrico, se dio orden de desarmen, siendo devuelto a su propietario, porque también era muy necesario su trabajo, para intentar paliar en lo posible la escasez de alimentos.